La liquidación de divisas repuntó 66% a u$s 509,1 M la semana pasada

La liquidación de divisas por parte de las empresas exportadoras de cereales, oleaginosas y derivados repuntó con fuerza la semana pasada y se ubicó en los 509,1 millones de dólares.
La cifra representa un aumento del 65,6% con relación a los cinco días hábiles previos, y un ascenso del 8,4% respecto a igual período de 2016.

Según indicaron la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), entre el 11 y el 15 de septiembre, las compañías del sector liquidaron la suma de 509.111.177 millones de dólares.

Asimismo, puntualizaron que el monto liquidado desde comienzos de año hasta el 15 de septiembre ascendió a 16.772.377.440 millones de dólares, un 8,5% menos que en igual lapso de 2016.

De esta manera, el desembolso por parte de los exportadores volvió a subir, tras la fuerte baja de la semana pasada, lo cual confirma la tendencia oscilante que prevalece en lo que va del año, con 19 semanas en las que lo ingresado fue menor al año anterior, y con 18 en las que fue superior.

El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) elevó la última su estimación de la producción de soja en ese país en 1,4 millones de toneladas hasta los 120,6 millones de toneladas y la de maíz en 800.000 toneladas hasta las 360,3 millones de toneladas.

A nivel global, el USDA consideró que las existencias cayeron a 97,5 millones de toneladas, menos de lo esperado por el mercado.

La cosecha de soja alcanzó este año las 57,1 millones de toneladas, por encima de las 55,3 millones del año pasado, pero lejos del récord histórico de 2015 con 61 millones.

La liquidación de divisas cerró 2016 en u$s 23.910,39 millones, con lo que se constituyó en la tercera mejor de la historia, detrás de los u$s 24.143,75 millones de 2014 y los u$s 25.133,39 millones de 2011.

En un comunicado, CIARA-CEC recordaron que la liquidación de divisas está fundamentalmente relacionada con la compra de granos que luego serán exportados ya sea en su mismo estado o como productos procesados, después de una transformación industrial.