La Reacción de la Demanda Marca un Límite a las Bajas de Chicago, por Eugenio Irazuegui

Ante un nuevo escenario de oferta en EE.UU. los granos convergen a nuevos niveles de equilibrio. Por otro lado, el mercado local de maíz se ve influenciado ante la presión estacional de cosecha...


El mercado volvió a barajar la posibilidad de una campaña agronómicamente favorable en EE.UU. luego de las sorpresivas subas en los rendimientos que consideró el USDA en su último reporte de oferta y demanda. Estas cifras generaron un cambio de expectativas que llevaron a las cotizaciones a definir nuevos valores de equilibro. En este sentido, la soja pasó a operarse en un rango de 340 – 344 U$S/tn. borrando la prima climática añadida durante las fases fenológicas iniciales. Sin ir más lejos, a comienzos de mes los precios anotados en Chicago oscilaban en torno a los 360 U$S/tn. cuando contemplaban una menor cosecha 2017/18.

El nuevo combo de rindes, cosecha y stocks influyó en el comportamiento de los fondos inversores que liquidaron masivamente los contratos abiertos de sus carteras y exacerbaron la caída de precios. De acuerdo a los datos publicados por la Comisión Reguladora de Futuros y Opciones (CFTC) la posición neta vendedora retornó a niveles de seis semanas atrás con un saldo de casi 6,40 mill.tn.
En simultáneo, los pronósticos climáticos auguran condiciones ambientales un poco más propicias para el desarrollo de las plantas en estas instancias y, con ello, elevan el potencial de rindes. Lo cierto es que los niveles de humedad continúan bajos en regiones centrales y es necesaria una ronda de lluvias generalizada que impida la rotura de vainas y mantenga el llenado de granos. Por otro lado, los cultivos muestran un crecimiento vegetativo sin mayores inconvenientes y acorde a la época del año.
Este escenario no era contemplado por la demanda unas semanas atrás que, en coincidencia con los operadores, esperaban que el USDA convalide las proyecciones privadas con rindes más escuetos. De esta forma, en su cronograma de compras no evaluaban los precios que se están negociando actualmente, factor que incidió positivamente en el interés de los compradores que se buscar asegurarse mercadería. 
La reacción de la exportación tuvo como protagonista a China que amplió los volúmenes comercializados y estuvo presente en los anuncios de ventas externas que se repitieron con mayor frecuencia en esta semana con más de 400.000 tn. A su vez, una delegación de importadores firmó un acuerdo comercial para la compra de unas 3,80 mill.tn. según el comunicado del Consejo de Exportación de EE.UU. luego de una reunión en Nebraska.
La debilidad externa se vio trasladada a la plaza doméstica con vendedores más reacios a comercializar su soja y, en lo que respecta a la negociación disponible, influyó de lleno el retroceso del dólar que amplió el desplome de precios valuados en moneda doméstica tocando los 4.000 $/tn. a comienzos de la semana. En las primeras dos ruedas, el tipo de cambio se derrumbó unos 65 centavos ante el impacto de la presión vendedora tras los resultados de las elecciones primarias. Un desarme de posiciones en dólares, el ingreso de fondos del exterior y un incremento en la oferta proveniente de la liquidación de la exportación colocaron bajo presión a la divisa. Seguidamente, detuvo su caída tras la licitación mensual de LEBAC por parte del BCRA en el que se renovó el equivalente al 85% de los vencimientos. En consecuencia, se liberó un remanente de pesos que fue canalizado parcialmente al mercado de cambios y marcó un punto de inflexión en la cotización.
El maíz logró diferenciarse y marcó una trayectoria más estable siendo que los cultivos estadounidenses transitan etapas de reproducción más avanzadas. Prácticamente la totalidad del cereal cumplió la floración y los primeros lotes implantados están dentando. El USDA está proyectando una media nacional de 106,4 qq/ha. aunque los operadores toman con cierto recelo esta cifra, considerando los períodos de escasa humedad en la franja oeste del cinturón agrícola, fundamentalmente en estados claves como Iowa, Minnesota y Missouri.
El mapa de monitoreo oficial mostró un agravamiento de la sequía en la porción sur de Iowa con el 2,5% del territorio catalogado como sequía extrema. A su vez, se evidenció un pasaje de hectáreas que ingresaron en la categoría de sequía moderada, mientras que la semana previa presentaban la falta de humedad era leve. Esta situación se ve contrastada por la franja este con perfiles cargados y sin anomalías.
Por otro lado, el mercado se ve condicionado por la entrada de la safrinha en Brasil que ejerce competencia directa con el mercado estadounidense. La recolección avanza a paso firme y afianza las chances de que la producción de maíz tardío alcance un máximo de 66,70 mill.tn. junto a un ritmo de embarques récord. No obstante, los valores FOB no difieren en gran magnitud de los precios ofrecidos en el Golfo de México y, la reciente apreciación del real brasileño es una de las variables que da lugar a esta paridad.
En el ámbito local, la operatoria disponible se conjuga con una exportación abastecida y consumos domésticos sin preocupaciones por los volúmenes de oferta. En el primer caso, las compras acumuladas de la campaña comprenden unas 18,33 mill.tn. y exceden en poco más de 1,50 mill.tn. a las declaraciones de ventas juradas al exterior. Esta brecha es radicalmente opuesta a la observada el año pasado, en momentos en que los exportadores contaban con mayores compromisos de embarques que grano originado.
A su vez se intensifica la presión de cosecha que podría extenderse hasta fines de agosto y primeros días de septiembre, con al momento unas 5 mill.tn. pendientes de recolectar. El volumen restante está mayormente concentrado en las regiones del centro – sur de Buenos Aires, zonas aún comprometidas por los anegamientos y el difícil acceso de los caminos rurales.
De esta manera, el mercado expresa la conveniencia de estirar los plazos de entrega del cereal. Los forward a septiembre operan con un plus de 4,50 U$S/tn. respecto al segmento disponible ofreciendo una tasa implícita directa en dólares de un 3,4%. Este diferencial compensa los costos financieros y de almacenamiento del productor, sobre todo de aquellos que ya embolsaron su producción. Si nos extendemos a diciembre, los futuros reflejan un premio que se amplía a 10,50 U$S/tn. arrojando una rentabilidad directa en dólares del 7,9% sin descontar gastos. La curva de precios en los mercados a término brinda incentivos a diferir entregas hacia fin de año.
En los próximos días tendremos un mercado avocado a los resultados que se obtengan del tour de cultivos llevado a cabo por Pro-Farmer en las zonas agrícolas de EE.UU. Tal como se realiza habitualmente todos los años, un grupo de productores y técnicos recorren las distintas regiones del Medio – Oeste y relevan el estado actual de los cultivos con el fin de tener un panorama más certero del volumen a cosechar. Cuán cercanos o lejanos sean los números respecto a los datos oficiales marcarán el rumbo de los precios esta semana.
Por Eugenio Irazuegui; Analista de mercados. Departamento Research de ZENI
Fuente: Centro de Gestión Agropecuaria