Proyecciones 2017/18: El maíz temprano es por lejos el cultivo menos competitivo



Una vez más le gana el maíz tardío.

El maíz temprano es el cultivo que a la fecha tiene la mayor probabilidad de generar quebrantos en el próximo ciclo 2017/18 en la zona agrícola argentina más competitiva (por productividad y cercanía a terminales portuarias).
El rinde de indiferencia del maíz temprano en la región núcleo pampeana es de casi 90 qq/ha con un precio esperado de 151,5 u$s/tonelada (cierre de hoy lunes del contrato Abril 2018 del Matba) y un costo de oportunidad de la tierra (o arrendamiento) de 300 u$s/ha (que puede parecer bajo para las pretensiones de algunos propietarios de campos de la zona).
Se trata además del cultivo que requiere la mayor inmovilización de capital: unos 625 u$s/ha sin considerar alquiler en un establecimiento prolijo -bien manejado- que no requiere gastos excesivos en herbicidas para controlar malezas problemáticas.
Segú difunde el sitio Valorsoja.com, el cultivo que por el momento parece más prometedor es la cebada cervecera/soja de segunda. El cereal de invierno, con un precio esperado de 173 u$s/tonelada (posibilidad de fijación anticipada que podría realizarse en función del esquema propuesto por Maltería Quilmes), tiene un rinde de indiferencia proyectado elevado (39 qq/ha), pero la soja de segunda, con un precio esperado de 255 u$s/tonelada, es muy competitivo: 18 qq/ha. Si la cebada finalmente logra calificar como cervecera, el valor esperado de la forrajera (160 u$s/tonelada) eleva el rinde de indiferencia del cereal a 43 qq/ha.
El trigo, a pesar de la importante suba de precios registrada en las últimas semanas, está a mitad de camino entre la cebada cervecera y forrajera con un rinde de indiferencia de 40 qq/ha en función del precio esperado actual (175,2 u$s/tonelada fue el cierre de hoy lunes del contrato Trigo Rosario Matba).
La soja de primera -siempre considerando un costo de oportunidad de la tierra de 300 u$s/ha- también se presenta, por el momento, como un cultivo competitivo con un rinde de indiferencia de 30 qq/ha y con un costo directo (sin alquiler) del orden de 350 u$s/ha.
El maíz tardío, a diferencia de su primo tempranero, nuevamente se vuelve a mostrar más competitivo al registrar un rinde de indiferencia de 55 qq/ha con un alquiler de 150 u$s/ha (compartido en partes iguales con algún cereal de invierno) y un costo directo de alrededor de 300 u$s/ha.
En todos los casos se considera una gestión (o costo de oportunidad del tiempo del propietario del establecimiento) de 30 u$s/ha.