Mucha diversidad
Con el clima un poco menos rebelde, muchos agricultores de la región pampeana avanzan con la cosecha de granos gruesos, un ingreso vital para recomponer la economía de las empresas. Los resultados económicos serán muy variables. Hay una proporción de productores que no sufrieron inconvenientes climáticos y alcanzarán rindes por encima del promedio histórico. Otros están en el extremo opuesto por las inundaciones en la zona núcleo o sequías en el sur bonaerense.
Cosechar y vender enseguida
Hay una gran proporción de agricultores con diversos grados de afectación que determina que muchos obtengan resultados justos. "Muchos productores deberán vender una proporción importante de la cosecha para pagar las tarjetas agropecuarias y otras formas de financiación. Los presupuestos cierran, pero con descapitalización; no habrá mucha plata para implantar la cosecha fina después de pagar a todos los proveedores", observa un vendedor de insumos del sur de Santa Fe.
Mucha plata gastada
La campaña se caracterizó por cultivos caros. "Hubo que aplicar muchos fungicidas, las malezas desarrollaron como nunca y la cosecha se encareció porque hay que prever encajaduras y roturas", observa un técnico. También hay pérdida de rindes en lotes con poco piso. Algunos cosecheros se ven obligados a no levantar el maicero en las cabeceras para no encajarse. "Si levanto el cabezal, el peso se transmite las ruedas y la máquina se clava", explica uno de ellos.
Con el clima un poco menos rebelde, muchos agricultores de la región pampeana avanzan con la cosecha de granos gruesos, un ingreso vital para recomponer la economía de las empresas. Los resultados económicos serán muy variables. Hay una proporción de productores que no sufrieron inconvenientes climáticos y alcanzarán rindes por encima del promedio histórico. Otros están en el extremo opuesto por las inundaciones en la zona núcleo o sequías en el sur bonaerense.
Cosechar y vender enseguida
Hay una gran proporción de agricultores con diversos grados de afectación que determina que muchos obtengan resultados justos. "Muchos productores deberán vender una proporción importante de la cosecha para pagar las tarjetas agropecuarias y otras formas de financiación. Los presupuestos cierran, pero con descapitalización; no habrá mucha plata para implantar la cosecha fina después de pagar a todos los proveedores", observa un vendedor de insumos del sur de Santa Fe.
Mucha plata gastada
La campaña se caracterizó por cultivos caros. "Hubo que aplicar muchos fungicidas, las malezas desarrollaron como nunca y la cosecha se encareció porque hay que prever encajaduras y roturas", observa un técnico. También hay pérdida de rindes en lotes con poco piso. Algunos cosecheros se ven obligados a no levantar el maicero en las cabeceras para no encajarse. "Si levanto el cabezal, el peso se transmite las ruedas y la máquina se clava", explica uno de ellos.