Ya se liquidó el valor de toda la soja y de la mitad del maíz de Córdoba

El aporte del agro equivale al valor bruto de la producción de soja y la mitad del maíz cosechados en Córdoba durante la campaña pasada.
El sector agroexportador sigue siendo la mayor fuente de divisas que tiene el Banco Central. En el primer trimestre del año, el complejo oleaginoso y los exportadores de cereales liquidaron un total de 5.900 millones de dólares. La cifra representa un aumento del 74 por ciento respecto al primer trimestre de 2015, cuando el sector ingresó 3.406 millones de dólares y es la mayor de la historia para el período enero-marzo.
El aporte del agro equivale al valor bruto de la producción de soja y la mitad del maíz cosechados en Córdoba durante la campaña pasada. Durante el ciclo pasado, en la provincia se produjeron 15,67 millones de toneladas que, a un precio promedio FOB (libre de retenciones y de gastos de comercialización) de 333 dólares por tonelada en los primeros tres meses del año, representa un valor bruto de 5.218 millones de dólares. Mientras tanto, los 8,4 millones de toneladas de maíz representaron un valor FOB de 1.382 millones de dólares.
 

La Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), que representan un tercio de las exportaciones argentinas, informaron que durante la semana pasada liquidaron 334,12 millones de dólares.
Con la finalización de marzo, la industria oleaginosa comienza un nuevo año comercial que coincide con el arribo de la nueva cosecha de soja. La Bolsa de Comercio de Buenos Aires estima que, entre abril y mayo, el sector liquidará más de 10 mil millones de dólares. Históricamente, ese cuatrimestre es el de mayor liquidación por parte del complejo oleaginoso y los exportadores de cereales. Entre esos meses se canaliza casi el 45 por ciento del total del aporte en dólares que realiza el agro.
La liquidación de divisas por parte del complejo oleaginoso y cerealero está fundamentalmente relacionada con la compra de granos que luego serán exportados, ya sea en su mismo estado o como productos procesados, luego de una transformación industrial.
La mayor parte del ingreso de divisas en este sector se produce con bastante antelación a la exportación, anticipación que ronda los 30 días en el caso de la exportación de granos y alcanza hasta los 90 días en el caso de la exportación de aceites y de harinas proteicas. Esa anticipación depende también del momento de la campaña y del grano de que se trate.

Fuente: Agrovoz.