No hay noticiero ni programa general que no trate el tema de la suba del precio de la carne vacuna y sus consecuencias. Históricamente fue cuestión de Estado pero la situación ha variado mucho. Hoy menos del 50% de la carne que se consume en nuestro país, es vacuna. La relación de los últimos años entre el precio del vacuno en Liniers y el asado fue 4.85 y hoy se encuentra 5.17, lo que justificaría que está por encima de la distribución normal y que los carniceros remarcan más.
Con la carne de cerdo la relación de los últimos años fue de 3.85 y hoy se encuentra un poco menor, 3.81 lo que fomenta aún más la opción para el consumidor. Del 1% del mercado de la carne que el cerdo tenía en el 2002, hoy ya supera el 13% y seguimos en ascenso.