Según varios especialistas, entre el 10 de diciembre y febrero
próximo habría una aceleración de las ventas de los productores si se
aplicara una política que elimine trabas a las exportaciones y las
retenciones.
El candidato que asuma el 10 de
diciembre próximo podría conseguir que en tres meses ingresen desde el
campo divisas por entre US$ 9000 y 14.000 millones si implementa una
política favorable al sector que acelere las ventas de la mercadería aun
sin comercializar en trigo, maíz y soja y estimule las de la nueva
cosecha triguera.
Así lo sostienen cuatro especialistas
que explicaron que esa política de incentivo de ventas se daría con una
eliminación de retenciones en trigo, maíz y girasol, una rebaja en soja y
una disolución de los permisos para exportar, conocidos como ROE.
De los dos candidatos que entraron al
ballottage, Mauricio Macri ya se pronunció de manera explícita por tomar
esas medidas, eliminando los derechos de exportación en trigo, maíz,
girasol y carne, y con rebaja de 5 puntos en soja.
Por el lado de Daniel Scioli, que ayer
asistió a la asunción de Juan Manzur como nuevo gobernador de Tucumán,
LA NACION pudo saber que aprovechó para reunirse con otros gobernadores
peronistas y allí habría estado avanzando con ellos en una agenda de
"fuertes definiciones" en materia agropecuaria, que incluirían la
eliminación de las retenciones a las economías regionales y una revisión
de ese impuesto para la soja, y terminar con los ROE.
En este contexto, ayer en el mercado hubo una ola de rumores sobre que el Gobierno realizaría anuncios para el sector.
Para Néstor Roulet, productor y diputado
electo al Parlasur por Córdoba con Cambiemos, aplicando las propuestas
de Macri podrían entrar US$ 14.000 millones antes de la nueva cosecha de
verano, en febrero. Según su estimación, entre el trigo sin vender y el
saldo exportable de la cosecha que se iniciará en un mes (9,29 millones
de toneladas entre el stock actual y lo que habrá para exportar con la
nueva cosecha), con este cereal se conseguirían 1765 millones de
dólares.
Además, en maíz, donde entre el stock de
2014 y lo que aun falta vender de la cosecha de 2015 suman 13,24
millones de toneladas, podrían llegar US$ 2052 millones. Finalmente, con
soja, donde Roulet calcula que hay posibilidades de venta de 28
millones de toneladas, entre el grano que tiene el productor y el stock
para procesar y exportar de la industria, el país recibiría US$ 10.191
millones.
"Eliminar las trabas a la exportación y a
las retenciones impulsaría las ventas de los productores, porque les
generaría una mejora de los ingresos, mercados más competitivos y
transparencia en los precios", señaló Ernesto Ambrosetti, economista en
jefe del Instituto de Estudios Económicos y Negociaciones
Internacionales de la Sociedad Rural Argentina (SRA).
Según proyecciones de Ambrosetti, son
casi US$ 9000 millones los dólares que podrían entrar con los granos que
restan de la última cosecha. En tanto, para Luis Miguel Etchevehere,
presidente de la Rural, "con las políticas adecuadas en la próxima
campaña el ingreso de divisas por parte del campo al país puede ser
mayor a 37.000 millones de dólares". Vale destacar que son casi US$
10.000 millones más que el ciclo pasado, 2014/ 2015.
Para Juan Manuel Garzón, economista del
Ieral, de la Fundación Mediterránea, que toma otra forma de cálculo con
respecto a los stocks de los productores, hasta febrero próximo podrían
ingresar entre 8000 y 9000 millones de dólares del campo con un
escenario "bueno".
En su opinión, ese escenario "bueno"
sería con un "gobierno amigable hacia el campo, promercado y con un
programa de estabilización macroeconómica", entre otros puntos.
En cambio, de acuerdo con Garzón, con
"un escenario de continuidad, que mantiene restricciones a la
comercialización, fuerte expectativa devaluatoria y elevados impuestos a
la exportación", el flujo estaría en el orden de los US$ 4500 millones.
"El cambio de escenario [a una situación de mejora para las ventas]
puede agregar un adicional de 4000 millones de dólares en ese período
[hasta febrero]", comentó.
A todo esto, de acuerdo con la
consultora Agritrend, del analista Gustavo López, podrían llegar divisas
por unos US$ 11.000 millones hasta febrero próximo.
Según este experto, esa cuenta se
conforma de US$ 7000 millones por 20 millones de toneladas de soja sin
comercializar del productor, otros US$ 1000 a 1200 millones con ventas
de soja nueva, 1700 a 1800 millones de dólares con trigo y cebada y
otros US$ 900 millones con el cultivo de maíz.
Fuente: Diario La Nación.