Productores de biodiésel de la Argentina
esperan un fallo favorable de la Organización Mundial de Comercio a fin
de año, para recuperar su acceso a la Unión Europea.
No
obstante estiman que los embarques recién se reanudarían durante los
últimos meses de 2016. "Esperamos que para fin de año ya tengamos el
primer dictamen de la OMC y somos optimistas, creemos que va a ser
favorable", dijo a la agencia Reuters Víctor Castro, director ejecutivo
de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio), que agrupa a
empresas productoras como Bunge, Cargill y Louis Dreyfus.
La Argentina inició un litigio el año pasado en la OMC para investigar las medidas antidumping establecidas por la UE contra el biodiésel argentino, a las que acusa de "injustificadas". El bloque aplicó a fines de 2013 un arancel promedio de un 24,6% por los próximos cinco años a las compras de biodiésel argentino y perjudicó severamente sus exportaciones, que hasta ese momento tenían la UE como principal destino. "Tras el fallo se vendrá un proceso de apelaciones, por lo que no tendremos nada definitivo hasta fines de 2016", dijo Castro y añadió que la Argentina pudo apelar a la OMC porque "sabe que puede ganar".
Según
Carbio, las exportaciones de biodiésel de la Argentina sumarían entre
650.000 y 700.000 toneladas en 2015, menos de la mitad de los 1,6
millones de toneladas embarcados el año pasado. "Es de esperar que el
fallo le sea adverso a la UE. Igualmente, el bloque buscará resortes
para postergar la definición del litigio", dijo el director ejecutivo de
la Asociación Argentina de Biocombustibles e Hidrógeno, Claudio Molina,
que también estimó las exportaciones de 2015 en 700.000 toneladas.