A
medida que nos acercamos a una nueva trilla en el territorio
norteamericano, el mercado parece tener más claras las perspectivas de
oferta, poco a poco dando lugar a la priorización de las circunstancias
de la demanda. Con un nivel de industrialización que viene mostrando un
ritmo récord a nivel internacional, la incógnita resulta ser que grado
de desaparición encontrará el poroto norteamericano a partir de la
exportación, especialmente con destino asiático.
En
el mercado a término de Chicago los contratos de la oleaginosa
finalizaron la semana prácticamente a la baja tras renunciar el día
viernes al grueso de las ganancias obtenidas a principios de semana. El
alza del día lunes tuvo lugar ante expectativas de una corrección en las
calificaciones de la condición de cultivos relevada por el Departamento
de Agricultura norteamericano (USDA). Los operadores descontaban en
promedio un ajuste a la baja de un punto en el porcentaje bueno a
excelente, pero el organismo terminó mostrando dicho guarismo dos puntos
porcentuales a la baja, dejándolo en un 61%, su nivel más bajo para
esta campaña. Sin embargo, el promedio para las últimas cinco campañas,
el cual coincidentemente alcanza también su nivel más bajo durante este
período, se ubica por debajo, en un 54%. En dicho sentido, el valor
actual resulta ser el más alto a esta altura del año desde el 2010.
El
USDA a su vez presentó el día martes su nueva estimación de superficie
implantada para la campaña 2015/16, la cual alcanzaría las 32,65
millones de hectáreas, casi medio millón por encima del dato de agosto.
Dada la amplitud del área sembrada y la relativamente favorable
condición mostrada por los cultivos parecen no quedar dudas de que esta
será la segunda mayor cosecha de soja en la historia de los EE.UU. La
pequeña caída interanual del área está más relacionada con las
complicaciones climáticas de que con una menor intención de siembra por
parte de los agricultores. El volumen de hectáreas bajo modalidad
prevent plant1
relevadas por el organismo totalizó casi 900 mil hectáreas, su nivel más
alto desde que se implementa la modalidad de aseguramiento. Más de 400
mil de ellas se localizan en Missouri, estado que como ya mencionamos en
ediciones pasadas, fue el que más sufrió el exceso de precipitaciones
que afectó al Medio Oeste a lo largo de la primavera.
Por
si tener un enorme saldo exportable no fuese suficiente, la
competitividad de la oleaginosa norteamericana en el mercado externo
podría verse diezmada en la medida en que su principal comprador, China,
continúe otorgando preferencia a contra-estación a la producción de
proveedores del hemisferio sur. Los
valores de exportación actuales para embarques en noviembre son
indicativos de ello. Al día jueves, mientras en terminales locales la
oleaginosa se ofrecía a unos u$s 352,5 la tonelada, en el Golfo de
México la misma posición tenía un valor de u$S 363,3.
Las
primeras proyecciones de producción en Brasil apuntan a una cosecha
cercana o por encima de los 100 millones de toneladas, merced a un alza
de la intencionalidad de siembra ante la elevación del tipo de cambio y
su efecto tanto sobre las cotizaciones internas del poroto como de los
costos para la producción de maíz, muy influenciados por el valor del
fertilizante importado. Otro participante que asoma amenazante es
Paraguay, cuyo calendario de cosecha se encuentra más cercano al
norteamericano por recolectar el grano entre enero y marzo. Allí la
superficie implantada alcanzaría los 3,5 millones de hectáreas, 200 mil
por encima de las sembradas el año anterior de acuerdo a datos
oficiales. Si bien estos son factores de preocupación para el productor
norteamericano, resultan aún más comprometedores para la cadena local,
considerando la cercanía de los mercados y su similar estacionalidad.
La
plaza interna mostró un deprimido nivel en su operatoria. La industria
se adjudicó mayormente el papel de ofertante, mejorando los valores
disponibles el día lunes en unos $20 la tonelada con respecto al viernes
anterior, pero dejando las ofertas estables el resto de la semana en
unos $2100 en condición disponible, siempre pudiendo mejorar según el
tamaño del lote. El viernes la caída del mercado externo provocó una
merma sensible en los precios difundidos abiertamente, los cuales
descendieron hasta el orden de los $2050 la tonelada. Durante la semana
no se hicieron propuestas por negocios sobre la nueva cosecha. El
mercado a término local presentó se sostuvo algo más que el de Chicago
pero de todas maneras presentó un deterioro en la mayoría de las
posiciones operadas. El contrato con entrega en condición fábrica sobre
mayo del año próximo, uno de los más operados, alcanzó los u$s 212 la
tonelada el día jueves, antes de desplomarse hasta los u$s 209,3 o unos
$1963,3 al tipo de cambio de referencia del BCRA2.
1
Modalidad de seguro que paga al productor el 60% de su rinde histórico
(concepto conocido como el prevent plant payment) en caso de que una
razón de fuerza mayor comprobable para el área en la que se encuentra su
terreno le impida llevar a cabo la siembre fuera de una ventana
determinada, luego de la cual pueden alternativamente abandonar la
implantación de ese terreno o plantar otro cultivo y sólo recibir un 35%
del prevent plant payment correspondiente.
2 Com. 3500 "A" = $9,3803/u$s para el 18/09.