Con
las mejores condiciones de humedad pero con los mayores recortes de
área, el maíz cubriría 438 mil ha en zona núcleo. No hubo sucesos que
alteren la proyección de siembra. Si hubiese un cambio de escenario para
el maíz a partir de diciembre; ¿habría tiempo de sembrar más maíz del
tardío? ¿Se amortiguaría la caída? El trigo resiste. Está casi por
desplegar la hoja bandera sin ceder a las enfermedades. A pesar de la
poca fertilización y de que estuvo bajo agua, sigue en carrera con
condiciones buenas a muy buenas en la región.
Arrancó
la campaña de granos gruesos con la siembra maicera. El progreso de las
labores está siendo muy dispar. En el norte de la región núcleo, muchas
localidades prácticamente están terminando con las siembras tempranas.
Pero, en zonas del centro, ante las bajas temperaturas que irrumpieron
en la última semana, se opta por retrasar la siembra. En toda la región,
pero sobre todo en el noreste bonaerense, son muchos los lotes que ante
una lluvia fuerte podrían volver a encharcarse, y se toma la precaución
de esperar unos días más. Pero la humedad en las camas de siembra es
escasa y una lluvia suave sería ideal para intensificar las labores de
implantación la próxima semana. No se han producido cambios en la
intencionalidad de siembra de los maíces tempranos. La caída de área
estaría en el orden del 40% respecto al año pasado. En el sector ven que
la carga financiera que tiene el cultivo es muy difícil de remontar en
un año cómo este.
¿Qué
pasaría ante un cambio de escenario para el maíz a partir de diciembre?
Las condiciones hídricas están a favor de las siembras tempranas.
También el hecho de que pocos días atrás se vieron los resultados de los
últimos lotes tardíos bajo condiciones de elevada humedad a cosecha.
Las expectativas de un año húmedo por delante hacen repensar las
ventajas de incluir siembras tardías. Por ello, las rotaciones están
prácticamente definidas. De aparecer cambios en diciembre que mejoren
los márgenes del maíz, se podrían sumar algunos lotes aislados en
reemplazo de sojas tardías o de segunda; es decir, no llegarían para
revertir significativamente la caída de siembra que se proyecta en el
área núcleo.
Las
heladas de la semana pasada rozaron las hojas del trigo sin producirles
efectos de gravedad. El cultivo se encuentra en buenas a muy buenas
condiciones atravesando las etapas que van de fin de macollaje a
encañazón, casi llegando a expandir la hoja bandera. Hubo algunos
cuadros con importantes ataques de roya que requirieron una aplicación
para bajar el nivel del inóculo pero en general no son necesarios los
tratamientos para el control de enfermedades.
La
superficie de soja de primera muestra una tendencia clara: sube ante
las hectáreas que no se hicieron con trigo y con las que no se harán de
maíz. Será la
siembra más importante de los últimos tiempos, en lo que se refiere a
hectareaje, no así en cuanto a la tecnología que se aplicará.
Los
pronósticos a corto plazo indican que a partir del domingo 20/9 la
nubosidad se incrementará significativamente pudiendo provocar el
desarrollo de algunas precipitaciones sobre el sur de la región. Durante
el lunes 21/9 las lluvias podrían ser algo más generalizadas y con acumulados relativamente dispares.
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