Argentina Productiva: el gobierno prohibió comprar maquinaria agrícola autopropulsada con créditos subsidiados para evitar un mayor drenaje de divisas


La medida rige a partir del segundo semestre de este año.

Las autoridades del Banco Central (BCRA) excluyeron a la maquina agrícola autopropulsada de los bienes financiables con los créditos de “inversión productiva”.

El propósito de tal decisión es reducir el déficit de divisas que viene registrando la economía argentina, dado que la mayor parte de los componentes de tractores, cosechadoras y pulverizadoras que se ensamblan en el país son importados.

La restricción no contempla maquinaria agrícola de arrastre –como sembradoras o tolvas– porque se trata de bienes conformados mayormente con insumos nacionales.

Representantes de la Asociación de Fábricas Argentinas de Tractores y otros Equipamientos Agrícolas (Afat), integrada por las filiales locales de las principales compañías internacionales de maquinaria agrícola, solicitaron al presidente del BCRA, Alejandro Vanoli, que se reincorpore la posibilidad de financiar autopropulsados con los créditos de “inversión productiva”. Pero hasta el momento no obtuvieron una respuesta al respecto.

En el primer trimestre de 2015 las ventas internas de cosechadoras ensambladas en territorio argentino subieron un 86% (212 unidades versus 114 en el primer trimestre de 2014), mientras que las de tractores se incrementaron en un 94% (905 versus 467), según los últimos datos oficiales publicados por el Indec.

Ese fenómeno se explica por compras oportunistas promovidas por créditos oficiales subsidiados que permitieron acceder a un bien cuasi-dolarizado pagando tasas de interés reales negativas (fenómeno que, justamente, es el que quieren evitar ahora las autoridades del BCRA).

Para el segundo semestre de 2015 el BCRA estableció que las líneas subsidiadas de “inversión productiva” deberán tener una tasa nominal fija en pesos del 18% anual para un plazo mínimo de 36 meses (versus una inflación anual del 27,9% según el IPC Congreso).

En los primeros cinco meses de 2015 la Argentina acumuló un déficit comercial de 964 millones de dólares, que marca una fuerte discrepancia con el saldo positivo informado por el Indec para el mismo lapso (776 M/u$s). “Cabe destacar que estas diferencias comenzaron a notarse a partir del año 2013, mientras que con anterioridad a esa fecha no existían variaciones significativas entre los datos de ambas fuentes oficiales”, apunta el último informe económico semanal del Banco Ciudad.