Los granos eluden el derrumbe chino


La baja de las bolsas chinas impactó en el precio de las “commodities” no agrícolas.Por ahora, el mercado de Chicago sigue respondiendo a factores de oferta y demanda.

Pablo Andreani


Esta semana volvieron a bajar las bolsas en China; en Shanghai y Shenzhen, tuvieron un derrumbe del 5,9 por ciento el miércoles pasado y van camino hacia el peor mes de su historia, acumulando una baja cercana al 30 por ciento en las últimas tres semanas.

Los commodities no agrícolas acusaron de lleno la fuerte baja registrada en todas las compañías que cotizan en las dos principales bolsas de China. Los precio del cobre bajaron al mínimo en seis años, los futuros del níquel en Shanghai cayeron el limite diario permitido de cinco por ciento y el petróleo crudo retrocedió a 56 dólares el barril, el mínimo nivel en tres meses.

Más de 500 empresas anunciaron la detención de sus transacciones en las dos bolsas, lo que llevó el número total de suspensiones en su operación bursátil a un número total de una 1.300 empresas, un 45 por ciento del mercado de cerca de 2,4 billones de dólares en acciones.

El temor a una menor actividad económica afectó principalmente los commodities no agrícolas relacionadas a la construcción, la tecnología, la fabricación de automóviles y el consumo de combustibles y energía para sostener los procesos de industrialización.

En otra dirección

En cambio, la tendencia de la soja en Chicago se mostró sostenida a firme a pesar de la fuerte baja en las acciones chinas registradas el pasado miércoles.

La soja volvió a acercarse a los 370 dólares en la posición julio, muy técnica por cierto por la cercanía de expiración de los contratos de futuros y las opciones. Para la posición agosto, el cierre fue de 366,25 dólares y para septiembre 363. Las subas se ubicaron en un promedio de 1,5 dólares y en la Argentina el precio de la soja disponible mejoró un dólar y cerró a 225 dólares; en cambio las posiciones futuras lejanas en el Matba tuvieron subas un poco más elevadas.

Para septiembre, la soja cerró a 233,5 dólares, una suba de tres dólares con respecto al mes anterior. La posición enero 2016 cerró a 244,5 dólares, el precio más alto de todo el año comercial, un muy buen nivel para tomar posiciones de cobertura a futuro.

Es muy importante destacar que a diferencia de la crisis financiera americana, cuando se produjo el derrumbe de la burbuja de las hipotecas inmobiliarias en Estados Unidos, a mediados del 2008, en ese momento fueron afectados todos los commodities agrícolas y no agrícolas.

En esta oportunidad, el comienzo del derrumbe de la burbuja en China no se vieron afectados los mercados de los granos.

Podemos argumentar y presuponer que Chicago hoy está siguiendo los factores de oferta y demanda y los fundamentals propios del mercado de la soja.

Los precios allí se mueven afectados por situaciones que están comprometiendo el potencial de los rindes y producción de la futura cosecha de soja americana 2015/16.

En el plano local, el mercado muestra una mayor firmeza para la soja disponible con descarga inmediata, llegando a pagarse hasta 2050 pesos la tonelada sobre el puerto de Rosario.

Para la entrega en el mes de julio se pagaban 226 dólares la tonelada y para entrega en septiembre, 228.

Para las posiciones futuras más largas los valores mejoran mucho más, siendo indicador de la gran necesidad que tiene la industria aceitera, ofreciendo pagar 236 dólares en octubre; 238 en noviembre y 240 para diciembre.

Hay que tener en cuenta, que la oferta de soja disponible durante los meses previos a las elecciones presidenciales, y luego de ellas hasta el 10 de diciembre, se verá drásticamente reducida. Dependerá de la magnitud de la retención a no vender por parte de los productores, de qué partido resulte ganador de las elecciones y el cambio propuesto en las políticas hacia el sector agropecuario.

Triego 2015/16

Avance de la siembra. Con un avance de siembra del 65 por ciento, el trigo 2015/2016 va consolidando un escenario con una fuerte disminución de superficie implantada. Según la Bolsa de Comercio de Rosario, la intención de sembrar 3,5 millones de hectáreas, 20 por ciento de caída frente al ciclo pasado, está en riesgo de concretarse.

Se acortan los tiempos. La ventana de siembra va acercándose a su fin y con más señales negativas. “Se enciende la alerta porque, además de la caída de intencionalidades, están faltando condiciones de humedad adecuadas para proseguir labores, particularmente en el oeste del país. El avance de las labores en Córdoba tiene un retraso de 15 puntos con respecto al año precedente”, precisa un informe de la bolsa rosarina.