Las gramíneas se siguen expandiendo y generan pérdidas de hasta U$S 100 por hectárea

 Según un informe difundido por Basf, hay aproximadamente 40 millones de hectáreas afectadas por este tipo de malezas, más que toda la superficie que se siembra con cultivos extensivos.

Un informe elaborado por la empresa Basf en colaboración con el Inta Pergamino advierte que en Argentina hay aproximadamente 40 millones de hectáreas afectadas por la presencia de gramíneas, que compiten por luz, agua y nutrientes con los cultivos, y constituyen así la mayor amenaza para soja y maíz.
El dato no es menor: representa una superficie mayor que las 36 millones de toneladas que se terminarán sembrando este año de soja, maíz, trigo, girasol, cebada, sorgo, maní, algodón y arroz, de acuerdo a las perspectivas del Ministerio de Agroindustria. 
El peligro para la agricultura extensiva argentina es claro: combatir estas malezas, en el caso de que sean tolerantes o resistentes, puede demandar un costo de hasta 100 dólares por hectárea, dependiendo la zona y el tipo de resistencia.
Especies y recomendaciones
Según el reporte, las zonas de mayor incidencia de gramíneas se centran en Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires, seguidas por Tucumán, Salta y Entre Ríos. 
Las especies más comunes son Sorgo de Alepo, Clorídeas, Echinocloa, Eleusine Indica, Chloris, Digitaria, Pappophorum y Leptochloa.
“Para una prevención correcta es necesario que el productor conozca la historia de sus lotes y los monitoree continuamente. Sumado a esto, es fundamental saber el manejo del flujo de la maleza por si se ve en la obligación de aplicar herbicidas de presiembra”, señaló Juan Carlos Ponsa, especialista investigador de Malezas de la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) Pergamino del Inta. 
Y agregó: “Con las malezas resistentes creemos que siempre es mejor prevenir para así contar con un cultivo que nazca limpio”.