Trigo: la cosecha no tiene piso y el precio no tiene techo. Pablo Adreani

Las principales potencias productoras y exportadoras de trigo del mundo están sufriendo las consecuencias del mal clima durante el período crítico de evolución de los cultivos: floración, espigazón y maduración. Estados Unidos, afectando el 30% de la producción de trigo duro de invierno, con epicentro en Kansas. En Rusia y en Ucrania, períodos de extrema sequía, previo a la floración, y excesivas lluvias posteriores, provocaron daños ya irreparables.

Si consideramos las estimaciones del USDA del pasado 12 de julio, redujo la producción mundial de trigo en 8 millones de toneladas. El dato más relevante es que la caída en la producción mundial de trigo 2019 versus 2018 es de 22 millones de toneladas. Hoy se proyectan 736 millones de toneladas, contra los 758 millones de la cosecha precedente.

Pero es aún más interesante para destacar que en la cosecha 2019 por primera vez en los últimos años el consumo mundial (749 millones de toneladas) superará a la producción (736 millones). Sucede que durante julio se produjeron pérdidas en las cosechas de trigo de EE.UU., Rusia, Ucrania, Alemania, Francia y de Australia, y esto no está contemplado en el ajuste efectuado por el USDA en su último informe mensual.

A pesar de esta situación realmente alarmante, el mercado de trigo en Chicago apenas subió US$13 dólares por tonelada en los últimos 60 días. Podemos intuir que el precio del trigo en el mercado internacional está reprimido y en cierta forma puede ser una olla a presión. ¿Cuánto puede subir el trigo en Chicago cuando el USDA blanquee las pérdidas del trigo en Kansas, Europa, Australia y en Rusia? Este es el riesgo y la gran oportunidad para los productores de nuestro país que todavía no han vendido posiciones futuras en el Matba o contratos forward para entrega en cosecha.

En cambio, el trigo en la Argentina acumuló una suba de US$40 por tonelada en el mismo período, equivalente a un aumento del 21%. A principios de junio la posición de trigo enero 2019 en el Matba se cotizaba a US$190. Hoy esa misma posición se negocia a 230 dólares.

La exportación debe estar olfateando una gran demanda por trigo duro, y en este sentido, el trigo argentino reúne la condición de ser muy competitivo. Todavía faltan dos meses para el ingreso de la nueva cosecha y el mercado ya subió US$40.

La posición diciembre del trigo se cotiza a US$220 y el contrato noviembre, a US$206. Es muy tentador sugerir a los productores de nuestro país que vendan al menos el volumen suficiente para cubrir el costo de producción, pues cada semana que pasa el trigo enero va tocando nuevos máximos. El riesgo es que el mercado se frene en seco y cambie abruptamente la actual tendencia firme que día a día se va consolidando, con mucha mayor firmeza en nuestro mercado que en Chicago.

Este ha sido un año de gran aprendizaje para los productores. Aquellos que han tenido la oportunidad de comprar calls de trigo enero, allá por junio, hoy están en condiciones de hacer un put sintético perfecto, vendiendo trigo posición enero o forward a US$230 por tonelada. La cobertura perfecta.

Sin embargo, quien no hizo nada también está en una situación de privilegio, pues puede vender hoy a US$230 por tonelada. Como está el mercado parece que el barrilete tiene más carretel para seguir subiendo, pero no hay que olvidar que los árboles no crecen hasta el cielo.


El autor es director de AgriPac Consultores