Entre la turbulencia y el optimismo Cristian Mira

Vale citar aquella frase que dice que "la fotografía es mala, pero la película es buena" para ilustrar la situación de la producción agropecuaria. Eso es lo que se desprende de la encuesta de productores CREA que se dio a conocer esta semana y que recoge consultas a 1354 miembros y 206 asesores de la entidad en la primera quincena del mes pasado.

La conclusión más clara es que se reflejan los efectos de la durísima sequía que afectó la campaña de granos gruesos. Pero no solo eso: también muestra el impacto de los desarreglos de la macroeconomía que comenzaron con la devaluación del peso y la suba de las tasas de interés.

Según la encuesta, el 66% de los empresarios CREA expresó que su situación hoy es peor que la de un año atrás y sólo 10% dijo que era mejor que en 2017. "La encuesta marcó un crecimiento considerable de la necesidad de financiamiento", sostiene el trabajo. Al respecto, dos de cada cinco de los productores que expresaron esa necesidad dijeron que debían refinanciar más del 25% de la deuda. "A su vez, 92% de los empresarios planea financiar capital operativo, necesitando en promedio 43% del total requerido para la implantación", añade. Ese porcentaje representa un incremento de cinco puntos porcentuales respecto de lo que sucedía en 2017.

Los tamberos tienen una situación financiera complicada. Según la encuesta CREA, la deuda total de los productores lecheros es 43% superior a lo normal. "En promedio, en los últimos dos años la deuda fue equivalente a 37 días de facturación, mientras que actualmente equivale a 53", explica.

En todos los segmentos de la producción, pese al presente difícil, se cree que el 2019 tendrá otro color. Al respecto, el 53% de los encuestados expresó que "la situación económica y financiera de su empresa será mejor el próximo año". Solo un 12% dijo que será peor.

Parte de ese optimismo se traduce en que los consultados dijeron que prevén aumentar 6,9% el área sembrada para la próxima campaña. En cuanto a las empresas ganaderas, el 52% expresó que "proyecta aumentar la retención en sistemas de cría, mientras solo 12% planea reducirlo". A su vez, el 60% de las empresas tamberas prevén aumentos en la producción para el próximo año.

El optimismo de la mayoría de los encuestados en el trabajo de los CREA sobre las perspectivas del próximo año coincide con los aumentos de área sembrada de los cultivos de invierno y las proyecciones de crecimiento de girasol.

En el caso del trigo, además, se está observando que los planetas se están alineando en favor de la Argentina. Los recortes de la producción en Europa y Rusia dan un escenario alcista para el cereal, con precios más que óptimos para la cosecha argentina. "Se está vendiendo mucho fertilizante", decía, entusiasmado, un experto productor y corredor en la Exposición Rural de Palermo.

Pero no en todos los segmentos la situación es igual. Las elevadas tasas de interés afectan a las pymes agropecuarias, expresó esta semana Coninagro. El presidente de la entidad, Carlos Iannizzotto, señaló que "de acuerdo con estudios privados, las pymes pagaron en julio tasas de interés promedio del orden del 60% anual en concepto de adelanto en cuenta corriente". Mientras el Gobierno no logre domar el potro de la crisis macroecnómica, la turbulencia no cesará.