Con 60% de costos dolarizados, tambos buscan una recomposición

Este lunes, a las 20, en la Sociedad Rural de Vicuña Mackenna, fue convocada una reunión para analizar propuestas para elevar a la Provincia y al Gobierno nacional.

La situación de los productores lecheros post devaluación, que agudizó el desfasaje entre costos y precios en la actividad --y potenciales medidas para contrarrestar estos efectos-- será abordada este lunes en la Sociedad Rural de Vicuña Mackenna, una de las entidades de base adherida a la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (Cartez).
El encuentro de los productores tendrá lugar a las 20, en la sede de esa Rural (España 533). Según adelantaron desde la entidad se trata de una reunión conjunta con autoridades de Cartez y municipales, en la que se tratará “la reiterada, y hoy exacerbada crisis de la producción láctea primaria, las medidas posibles a tomar para contrarrestar los efectos de un desfasaje dólar/peso que agudizó la de por sí grave situación que la lechería a nivel tambo viene sufriendo año tras año, sin encontrar el equilibrio que impida la constante liquidación”.
Estructura de costos
El presidente de Cartez, Gabriel De Raedemaeker, adelantó a Agrovoz que se tratará de un encuentro de trabajo en el que se tratarán de consensuar cuatro o cinco puntos que serán puestos a consideración de la Provincia y del Gobierno nacional. 
A modo de diagnóstico, mencionó que el incremento del tipo de cambio incide fuerte en los costos dolarizados del tambo, que están en un 60 por ciento del total, con insumos que tienen una alta incidencia como el maíz y la alimentación de los rodeos. “Queremos ver de qué manera se puede trasladar este efecto en toda la cadena y que este costo no lo pague solo el productor”, dijo De Raedemaeker.
Mencionó que hay reclamos que tienen que ver con los valores de exportación que no estarían llegando al productor. “El productor necesita que la industria mejore el precio en camión para poder reacomodar la estructura de costos, que se ve afectada por la alimentación y las tarifas de energía”, dijo De Raedemaeker.