ENTRE MALABARES AGRONÓMICOS Y FINANCIEROS Marianela De Emilio

Año clave para las decisiones comerciales y productivas, los recursos económicos y financieros son acotados en muchas agro empresas y los resultados hablarán de nuestra habilidad de gestión, entre malabares agronómicos y financieros.
 
Decisiones comerciales: Los temores sobre la macroeconomía del país (tipo de cambio, tasas de interés, etc.), se mezclan con la especulación sobre los precios de los granos, en un mercado internacional movilizado por nuestra sequía, el Presidente chino, el frio en Estados Unidos, etc., y así solemos reaccionar poniendo a la espera decisiones que deben ser tomadas a tiempo.
Consideremos los precios actuales y futuros, las posibilidades de precios a la suba, laterales o a la baja (riesgo precio), y la coyuntura local. Son muchas variables y realmente debemos convertirnos en malabaristas para que no caiga nada al suelo, sobre todo nuestra rentabilidad.
Es un año para usar correctamente las reservas de soja, evitar financiamientos caros, siendo hábiles en las decisiones de ventas y compras para la campaña que viene.
Entre el 4 y 11 de abril, con una soja disponible por encima de los U$S 300/TN, y los precios futuros llegando a topes record, solo se comercializaron 100 mil toneladas de soja 16/17, mientras que de soja nueva se vendieron 800 mil y en el MATBA se operaron más de700 mil toneladas entre futuros mayo, julio y noviembre 2018. Esto demuestra la fuerte tendencia a retener grano viejo, del cual quedan más de 8 millones de toneladas a pesar de los precios pico, mientras con casi el 40% de nuestra superficie cosechada, ya se han vendido 15,5 millones de toneladas de soja nueva, es decir, casi todo lo cosechado fue vendido.

El mercado de soja seguirá pendiente del clima en Estados Unidos, que comienza a mejorar, dado que entre mayo y junio se completan las labores de siembra en ese país; las exportaciones seguirán siendo motivo de especulación en Chicago, y mientras esto pase, las oportunidades de subas deben ser aprovechadas, sin dar por sentado que nos instalamos en un mercado alcista de mediano y largo plazo.
Ventas oportunas de físico, como ventas futuras o compra de opciones sobre futuros, son decisiones a tomar con valores de soja por encima de los U$S 300/TN.
Maíz y trigo, con una realidad local que nos separa del mercado internacional, por falta de volumen, deben ser bien administrados, para captar las subas que sigue ofreciendo el corto plazo, y compensar los recortes de volumen de maíz y soja de segunda. Valores de trigo por encima de U$S 215-220/TN en el disponible son excepcionales para el saldo de trigo 17/18, mientras en maíz esperamos valores entre U$S 190-200/TN para salir a vender.

Los precios de la 18/19 son buenos en soja (más de U$S 300/TN) y en trigo (más de U$S 185/TN), considerar ventas futuras u opciones para estas futuras cosechas, sobre todo en trigo, con buenos pronósticos y posible aumento de área a sembrar.

Decisiones Productivas: Se viene la fina y las lluvias llegaron para elevar la expectativa con un trigo que tiene el mismo precio que la soja un año atrás. Uno de los dilemas a resolver es sobre la aptitud hídrica de cada lote, ya que el primer trimestre del año no solo causó daño a los cultivos de verano, sino que dejo suelos con contenidos de agua útil (agua aprovechable por los cultivos) extremadamente escasos a nulos, tal como se observa en el mapa de balance de agua en el suelo al 26 de marzo, y aun no se han recuperado del todo, como se observa en el segundo mapa, al 16 de abril. 
 


Así las lluvias que se acumulen en los próximos 15 días, serán decisivas en muchas zonas del centro del país, para sembrar o no un cultivo de invierno. Hay métodos sencillos de medición de agua en el suelo para analizar cada lote, y tomar decisiones correctas, como el que puede verse en el siguiente link: https://www.youtube.com/watch?v=OHpQwZU7wvE, elaborado por profesionales de INTA Marcos Juárez.

Una vez decidida la siembra de trigo, invertir en tecnología adecuada para obtener cantidad y calidad que, desde lo económico, nos permita reducir costos y elevar beneficios, por ejemplo a través de elegir variedades que asocien rendimientos estables por encima del promedio, parámetros de calidad comercial adecuados (contenido proteico, peso hectolitrico y gluten principalmente) y tolerancia a enfermedades.

Conclusiones: Las decisiones comerciales pueden apalancar la próxima campaña, todo valor disponible o futuro que logre elevar el precio promedio de ventas, debe traducirse en buenas decisiones de compra, que ahorren financiamientos caros. Las reservas de granos o de liquidez, deben administrarse en función de los recortes de ingresos por menor volumen de cosecha en esta campaña, y la necesidad de recuperarnos en la próxima, recalculando inversiones y compensando los menores ingresos actuales con lo que tenemos en nuestro propio banco central (silos, ahorros, etc.). En caso de no disponer de reservas, es un buen año para plantearnos el interrogante de cómo estamos planificando nuestras entradas, salidas, e inversiones, de modo que no logramos año a año un retorno superador, que permita construir las reservas para ser usadas en años de vacas flacas.
Desde lo financiero considerar la oferta de créditos en Dólares, tasas en torno al 6% anual, sumado a una devaluación proyectada menor al 19% anual, se convierte en una tasa en PESOS del 25%. Sacarle punta al lápiz y calcular tasas, más comisiones, menos desgravamen de ganancias, para tomar decisiones financieras acertadas vinculadas a las comerciales, que disminuyan los costos futuros, para un mejor resultado económico final.
Ser cautos además en las decisiones productivas, apostar a la fina ajustando la tecnología de implantación para lograr buenos rendimientos en cantidad y calidad comercial.
 
Ing. Agr. Marianela De Emilio
INTA Las Rosas