El trigo se alimenta con buenos márgenes a la espera de más lluvias

En el Inta Marcos Juárez estiman un aumento del 120% en el margen bruto del cereal. Combinado con una soja de segunda, supera a un planteo exclusivo de soja o maíz.
Según una estimación el economista Carlos Ghida Daza, del Inta Marcos Juárez, el margen bruto del cereal para la campaña que está por comenzar duplica, en pesos, al del año pasado.
Este cálculo es para el sudeste de Córdoba, uno de los territorios más productivos del país, pero en toda la provincia se espera también un resultado favorable: la Bolsa de Cereales estimó hace tres semanas que, con el mejor precio a cosecha en cinco años, el margen bruto se ubicaría en 65 dólares por hectárea, 47 por ciento por encima del promedio de las últimas campañas.
Jornada triguera

Según los cálculos de Ghida Daza, el costo directo total de implantar una hectárea de trigo en el sudeste de Córdoba se sitúa en 3.539 pesos: 1.234 pesos en labores (siembra, pulverización y fertilización) y 2.340 pesos en insumos (semilla y curasemilla, herbicidas y fertilizantes).
Esto significa un incremento del 26 por ciento interanual, en línea con la inflación medida por el Indec; es decir, en términos reales, el costo directo se mantiene entre un año y otro.
Ecuación
El factor clave en este contexto, es el aumento del 20 por ciento que mostró, en dólares, el precio futuro del trigo: el valor interno esperado a cosecha 2018/19 se sitúa en 3.851,8 pesos, 52,3 por ciento por encima de los 2.528,5 pesos obtenidos a fines del año pasado.
Bajo este panorama, el trigo, cultivado en campo propio, alcanzaría un margen de 6.316,2 pesos por hectárea. Esto significa un 120,6 por ciento más que los 2.836,6 pesos que se estimaban en marzo de 2017.
Combinado con soja de segunda, cuyo margen su proyecta un 69,5 por ciento superior al actual, un campo con esta rotación llegaría a un saldo positivo de más de 16 mil pesos, casi el doble de 8.591,6 pesos proyectados hace un año