Soja: la industria aceitera está más activa que la exportación

En la segunda semana de marzo, la molienda compró 2,3 millones de toneladas. La exportación, sólo 80 mil. 
El mercado está reaccionando, tal cual lo reflejábamos en nuestros análisis de semanas atrás. La tendencia bulish (alcista) cambio drásticamente a bearish(bajista), cuando el mercado terminó por digerir y asumir las perdidas reales de soja en la Argentina, un hecho que viene ocurriendo desde principios de mes a la fecha.
A la estimación de Oil World, reconocida consultora europea, que dio el primer alerta de 40 millones de toneladas de producción de soja en la Argentina, se sumó la semana pasada el mismo número de producción elaborado por el departamento de estudios económicos de la Bolsa de Comercio de Rosario. Y a pesar de esta pobre cosecha el mercado ha reaccionado con fuertes bajas, copiando la tendencia bajista de Chicago.
Hasta hace un par de semanas el mercado estimaba un volumen de producción de 45/47 millones de toneladas luego de partir en presiembra de un potencial productivo de 57 millones de toneladas. Pero luego de la continuidad de la sequía, las perdidas sobre los cultivos han sido irreversibles y esto confirma una de las peores cosecha de soja de la última década.
Estrategias
Los fondos de especulación en Chicago sólo necesitaban de una excusa para cambiar su posición y la sequía en la Argentina fue la primera. A partir de la falta de lluvias en febrero, los fondos dejaron su posición vendida a la espera de la baja de los precios. Cosa que no ocurrió y armaron una nueva posición comprada pensando en una potencial suba, algo que tampoco ocurrió.
Vemos que en esta oportunidad los fondos equivocaron de posición y tuvieron que asumir fuertes pérdidas. Como decíamos, el mercado reaccionó en forma opuesta a la esperada por los fondos: en lugar de buscar la suba se produjo una consistente baja del mercado que ya lleva más de tres semanas.
Entre el 1° de marzo a la fecha, los precios de la soja en Chicago acumularon bajas de 14 dólares por tonelada para las posiciones cercanas: mayo cotiza a 378,38 dólares contra 392,43 de principios de mes. Mientras que los futuros lejanos, septiembre, perdían 8,3 dólares hasta llegar a 378,6 dólares.
En el mismo periodo, la harina de soja en Chicago perdía 36 dólares en la posición mayo y los futuros lejanos, (septiembre) perdían casi 22 dólares. Esta mayor baja en las posiciones futuras son un indicador que los precios tanto del poroto de soja como de la harina de soja estaban sobreestimados.
Mercado local
En nuestro país, la soja disponible perdió 25 dólares desde principios de mes. Para mayo, la baja fue algo menor, 17 dólares, para llega a 292,5 dólares. Aquí aparece una situación que no es lógica, los precios de la nueva cosecha cotizan por arriba del nivel de precios de la soja disponible. Esto es así pues la industria aceitera ha quitado presión al ritmo de compras de soja disponible y se concentra en el ingreso de soja de la nueva cosecha.
Un dato a tener en cuenta, la mayor oferta de soja, tanto disponible como de la nueva cosecha, se direcciona al mercado de las industrias de aceite. Esto es debido a los problemas de calidad que se están observando en lotes de soja que están a punto de cosecharse.
En la segunda semana de marzo, las aceiteras compraron un total de 2,3 millones de toneladas de soja, 1,7 millones de soja nueva y 600 mil corresponden a soja disponible. En el mismo periodo, la exportación compró apenas 70 mil toneladas de soja nueva y 10 mil toneladas disponible.
Puede ser una gran oportunidad para los productores que tienen soja de calidad exportación, ya que pueden obtener una prima o sobreprecio con respecto al mercado de soja industria. Este potencial puede no verse reflejando en mayores dólares por tonelada, pero sí en no sufrir los descuentos por mala calidad.