China redujo aranceles para la importación de alimentos: “Es una oportunidad para Argentina”

Langostinos, lácteos, pastas, mermeladas y bebidas con y sin alcohol obtuvieron rebajas para ingresar al gigante asiático. "No podemos dejarlo pasar", dijo la embajada nacional en Beijing.
Un informe de la Embajada argentina en Beijing destacó que China redujo los aranceles para las importaciones de productos agroindustriales y aseguró que es una “enorme oportunidad” para nuestro país.
El Ministerio de Finanzas del gigante asiático tomó la medida el 1 de diciembre pasado para bajar los precios y estimular el gasto del consumidor final, y contempla la rebaja en 187 productos de consumo en los que no es productor o es importador neto, de los cuales 32 son alimentos que exporta la Argentina. 
Por un lado, los langostinos bajaron del 5% al 2% en la variante de congelados, lo cual beneficia en primer lugar al país dado que exporta el 62% a China.
En tanto, los lácteos obtuvieron un descenso en todos los quesos, con excepción del fresco, lo cual “permitirá mejorar la competitividad de otros proveedores, entre ellos Argentina, frente a países que tienen firmado acuerdos de libre comercio con China, como Nueva Zelanda y Australia”, explicó el informe. En cuanto a las preparaciones infantiles y fórmulas lácteas para niños, se busca también disminuir el precio.
Asimismo, en alimentos y bebidas se aplicó una baja en pastas sin cocinar, secas, sin huevo y en mermeladas de frutas, agua mineral, vermut y bebidas de la destilación de vino y whisky.
“La reforma es un nuevo elemento que subraya la enorme oportunidad que los productos argentinos pueden encontrar en el mercado chino, siempre que nuestras empresas estén a la altura del desafío y puedan desarrollar una eficiente logística de la exportación, nuestro eslabón más débil para abastecer a la demanda china”, expresó el embajador argentino en China, Diego Guelar.
En ese sentido, Guelar aseguró que “las oportunidades se multiplican, sólo falta aprovecharlas; tenemos la enorme demanda china, con un poder de compra creciente, y un profundo deseo por consumir (y pagar lo que haga falta) alimentos de alta calidad y sin contaminación como los argentinos”.
“Tenemos las plataformas de comercio electrónico para comercializar y distribuir los productos, como hemos demostrado con el éxito de ventas en la celebración del día de los solteros junto a Alibabá; y ahora nos vemos beneficiados por esta reforma arancelaria. No podemos dejar pasar la oportunidad”, cerró el embajador.

MARINA FRIEDLANDER