Los presidentes de ambos organismos –Amadeo Nicora y Alberto
Iannizzotto, respectivamente– firmaron un convenio en el que acordaron
la colaboración mutua para el desarrollo agropecuario y agroindustrial
nacional.
A fin de promover el desarrollo agropecuario y agroindustrial con el foco en los productores y sus familias, mediante el incremento de la productivdad, el asociativismo y la sustentabilidad, los presidentes del INTA y Coninagro –Amadeo Nicora y Alberto Iannizzotto, respectivamente– firmaron un convenio en el que acordaron la colaboración mutua.
En el marco del encuentro, Nicora destacó los temas de interés surgidos en su reciente visita por Brasil por la reunión del Procisur entre los que recalcó el gran interés de Embrapa en instalar un Labex en Argentina y un Labintex en Embrapa para 2017.
A su turno Iannizzotto detalló que en la reunión del Consejo de Coninagro surgió la necesidad de trabajar en conjunto con el INTA en materia de agregado de valor, para lo cual se firmó un borrador de un convenio marco.
“Este convenio es una línea estratégica para 2017”, aseguró el presidente de Coninagro quien agregó: “La idea es darle territorialidad para darle un mayor contenido cooperativo, para valorar y brindarle seguridad a los productores y aumentar su autoestima”.
Y agregó: “Con este convenio unimos logramos unir el agregado de valor con la competitividad, al tiempo que lo vinculamos con la extensión. Por este motivo es que necesitaremos un fuerte apoyo político para que se resalte el trabajo conjunto”.
En este sentido, Nicora fue más allá y consideró “fundamental” la necesidad de “asociarse con el Ministerio de Agroindustria a fin de trabajar para recuperar el espíritu cooperativo”.
Este convenio firmado con Coninagro permitirá, a su vez, elaborar publicaciones, boletines y artículos en conjunto y organizar capacitaciones en temas relacionados con el cooperativismo, las buenas prácticas agrícolas y las tecnologías de la información y la comunicación (TIC´S) aplicadas al sector.
A su vez, entre los objetivos, se encuentra como línea de trabajo específica la colaboración con productores familiares a fin de lograr el agregado de valor en las distintas regiones del país.
A fin de promover el desarrollo agropecuario y agroindustrial con el foco en los productores y sus familias, mediante el incremento de la productivdad, el asociativismo y la sustentabilidad, los presidentes del INTA y Coninagro –Amadeo Nicora y Alberto Iannizzotto, respectivamente– firmaron un convenio en el que acordaron la colaboración mutua.
En el marco del encuentro, Nicora destacó los temas de interés surgidos en su reciente visita por Brasil por la reunión del Procisur entre los que recalcó el gran interés de Embrapa en instalar un Labex en Argentina y un Labintex en Embrapa para 2017.
A su turno Iannizzotto detalló que en la reunión del Consejo de Coninagro surgió la necesidad de trabajar en conjunto con el INTA en materia de agregado de valor, para lo cual se firmó un borrador de un convenio marco.
“Este convenio es una línea estratégica para 2017”, aseguró el presidente de Coninagro quien agregó: “La idea es darle territorialidad para darle un mayor contenido cooperativo, para valorar y brindarle seguridad a los productores y aumentar su autoestima”.
Y agregó: “Con este convenio unimos logramos unir el agregado de valor con la competitividad, al tiempo que lo vinculamos con la extensión. Por este motivo es que necesitaremos un fuerte apoyo político para que se resalte el trabajo conjunto”.
En este sentido, Nicora fue más allá y consideró “fundamental” la necesidad de “asociarse con el Ministerio de Agroindustria a fin de trabajar para recuperar el espíritu cooperativo”.
Este convenio firmado con Coninagro permitirá, a su vez, elaborar publicaciones, boletines y artículos en conjunto y organizar capacitaciones en temas relacionados con el cooperativismo, las buenas prácticas agrícolas y las tecnologías de la información y la comunicación (TIC´S) aplicadas al sector.
A su vez, entre los objetivos, se encuentra como línea de trabajo específica la colaboración con productores familiares a fin de lograr el agregado de valor en las distintas regiones del país.