Trump, el socio que faltaba en el tablero del comercio

Panorama agropecuario// Exportaciones// Los agregados agrícolas en EE.UU., Brasil, China y la UE estarán hoy en Córdoba.

Carlos Petroli

En la oficina agrícola que representa a la Argentina en Washington prefieren ver la botella medio llena: pese a que no lo tenían en los papeles, el giro político en la administración estadounidense –con Donald Trump en la Casa Blanca– no será un escollo insalvable para la matriz exportadora del país, al menos en este rubro, que genera las mayores divisas comerciales en el mundo.

Desde el flanco de la botella medio vacía, Trump promete ejecutar replanteos en las relaciones de Estados Unidos con los bloques de comercio (léase Nafta, Europa, cuenca del Pacífico). Mientras tanto, algunos actores locales instalan conos de incertidumbre en torno del ingreso de capitales y de inversiones, según sea el manejo de las variables cambiarias y financieras estadounidenses a partir de 2017.

“Córdoba al mundo”

José Molina, agregado agrícola en Washington, estará hoy en el seminario “Córdoba al mundo” –en la Legislatura, a partir de las 10–. Su análisis indica que a Estados Unidos no le cae bien el traje del proteccionismo, por cuanto exporta el 20 por ciento de su producción agrícola.
Por la misma cuerda, genera importaciones de agroalimentos por 150 mil millones de dólares anuales (la Argentina es el proveedor número 22, con una participación de sólo el uno por ciento).
Por definición, dice Molina, Washington sostiene como política de Estado a los mercados abiertos, sin barreras para arancelarias, materia en la que comparte una “agenda común” con la Argentina. Y aparece como partner estratégico en biotecnología, seguridad alimentaria, cambio climático.

Los últimos nichos acordados por Macri con la administración Obama (limones de Tucumán y cuota de carne bovina) no deberían encontrar dificultades, según el representantes agrícola. El ingreso de los cítricos se considera inminente (antes de que entre la administración Trump) y, en el caso de la cuota de carne, se menciona que ya hay un compromiso político. Sobre un millón de toneladas que Estados Unidos importa por temporada, la cuota Argentina no resulta significativa. “No creo que a Trump le preocupen las 20 mil toneladas de carne argentina”, dice Molina.

Al igual que en la jornada sobre perspectivas agrícolas que organizó esta semana el Ministerio de Agroindustria en Buenos Aires, Molina compartirá hoy en la Legislatura de Córdoba el panel junto a sus colegas Hernán Viola (Beijing, China); Gastón Funes (Bruselas, Unión Europea) y Javier Dufourquet, en Brasilia.

Junto a estas cuatro oficinas agrícolas, el Gobierno argentino está tramitando la apertura de una quinta en Moscú, para alimentar la estrategia de sumar especialistas en la “primera trinchera” del negocio exportador.

Cada mercado tiene sus peculiaridades. En China es necesario negociar producto por producto; tras el ingreso del coloso asiático a la OMC hubo mayor apertura y en esta plaza se busca diversificar la oferta (en 2015, la Argentina fue el séptimo proveedor de productos agrícolas, principalmente desde el complejo sojero).

La UE importa agroalimentos por 110 mil millones de euros (70 por ciento commodities ), pero también es gran exportadora de trigo (33 millones de toneladas en 2015). Como frentes inmediatos y mediatos están la “caja de Pandora” del Brexit (el proceso de desacople del Reino Unido debe quedar consolidado en 2019), las restricciones a las semillas transgénicas, normas de sustentabilidad ambiental y la caída de derechos antidumping para el biodiésel. La UE tiene plazo hasta el 26 del corriente para apelar el fallo de la OMC, que favoreció a la Argentina.