Volvieron los $ 4.000/ton y se calentó el mercado SOFÍA CORINA

El USDA ratifica mes a mes la producción récord y, pese a ello, los precios no parecen sentir la presión. El mercado externo se sostuvo en la suba del aceite de soja y la robusta demanda, arrastrando consigo al mercado local donde se volvieron a gritar los $4.000/ton dando lugar a un vendaval de ventas.

En Chicago, la demanda dio sostén a los precios pese a la cosecha récord

Los precios de la soja en Chicago vienen en caída desde el mes de junio de este año, cuando todavía se creía que la Niña podía dañar los cultivos en Estados Unidos. Sin embargo, por el contrario, el rinde de la oleaginosa explotó al contar con las lluvias más abundantes de los últimos 30 años en el periodo crítico del cultivo durante el mes de agosto. Si bien, esto hubiese podido generar enfermedades, las mismas no se visualizan en los resultados obtenidos. Con un avance de trilla reportado por el USDA el lunes pasado del 44%, se vislumbran rindes promedios de 34,6 qq/ha. 

Frente a los niveles récord de rindes de la presente campaña, incluso hasta 3 qq/ha superiores a los anteriores máximos históricos, es esperable que los precios se hundan. Sin embargo, los valores promedio del mes de octubre en el mercado de Chicago se mantienen estables respecto a la campaña 2014/15 y están aún u$s 25/tonelada por encima de la campaña pasada. 

Es evidente que la demanda, especialmente de la exportación, está jugando un papel crucial en el sostenimiento de los precios en Chicago. Según el reporte mensual de oferta y demanda del USDA conocido el miércoles 12/10, la nueva campaña proyecta un uso total de 111,6 millones de toneladas en EE.UU, siendo que la campaña pasada a esta misma altura del año se proyectaban 4,3 millones de toneladas menos.  

Frente a ello, los stocks mundiales de soja, al contrario de lo que ocurre con la producción, no llegan a tocar su valor más alto ya que en la campaña 2014/15 los stocks se contaron 78,5 millones de toneladas, y hoy se prevén 77,36 millones para la campaña entrante. Si miramos la relación stock/consumo, en tanto, podemos observar en el gráfico que la misma se mantiene invariable respecto al año pasado. 


Para el gigante brasileño se estimó una suba en su oferta que llegaría  a los 102 millones de toneladas de soja, mientras que para nuestro país, el mismo organismo sostiene una producción de 57 millones de toneladas, basado en un rinde nacional de 29 qq/ha. Sin embargo, falta un largo trecho por recorrer siendo que el grueso del área no está aún sembrada y los pronósticos de La Niña, aunque leve, podrían recortar la producción en Sudamérica. 

En este sentido, los organismos nacionales  son más cautos con las estimaciones de la oleaginosa. Según la Guía Estratégica para el Agro de la BCR, la superficie se contraería un 3% respecto a la campaña pasada mientras que para la Bolsa de Cereales de Buenos Aires la producción de la oleaginosa sumaría a 53 millones de toneladas. Ambas bolsas coinciden que la superficie implantada seria de 19,6 millones de ha.  

En tanto en el recinto del Mercado Físico rosarino, la actividad se desarrollaba con parsimonia hasta que el día viernes las ofertas por soja disponible llegaron a los $ 4000/tn y activaron las negociaciones, principalmente para la oleaginosa con descarga inmediata. Según fuentes del mercado, los volúmenes negociados podrían haberse ubicado  entre los 170 y 180 mil toneladas.

Sucede que la barrera psicológica de los $ 4.000/ton está muy presente en la mentalidad del sector oferente. Frente a ello, los restantes cuatro días de la semana con ofertas abiertas en torno a los $ 3.900/tn, la motivación para cerrar negocios era prácticamente nula. Prueba de ello, de acuerdo a los datos brindados por el Ministerio de Agroindustria, al 05 de octubre sólo se había comprado un 68% de las 55,3 millones de toneladas producidas, volumen muy por debajo del promedio de los últimos cinco años (76%) y de la campaña pasada (73%). Además, del total de compras realizadas, quedan 19,6 millones de toneladas sin precio firme. 


Respecto a la nueva campaña, la semana no ha traído grandes novedades ya que sólo un exportador hizo ofrecimientos abiertos de u$s 255/tonelada, mientras que los vendedores esperan cifras cercanas a los u$s 260/tonelada para desprenderse de sus lotes. Sin embargo, con un FAS teórico para la exportación del grano en las terminales de nuestra región que pivotea en torno a los u$s 250/tonelada, no hay de momento incentivo para mejorar los ofrecimientos.  

Mirando hacia adelante, cabe destacar que  las previsiones globales del USDA se basan en estimaciones muy preliminares para el Hemisferio Sur, donde las siembras recién están dando comienzo. Habida cuenta que la producción combinada de América del Sur suma casi 175 millones de toneladas, más de la mitad de la producción mundial, queda claro que cualquier problemática productiva tendrá un fuerte impacto en los precios. Es de suponer por ello que el mercado climático sudamericano, a desarrollarse en los próximos meses pueda imprimir de una notable volatilidad a los precios.