En una campaña donde la caída de precios a raíz de la amplia oferta mundial está en boca de todos, el experto Leandro Pierbattisti va un paso más allá explicando cómo puede evolucionar el mercado global de trigo en general, y qué rol le cabe a Argentina en particular. El papel de Rusia como principal proveedor, la potencialidad de la calidad de las súper-cosechas 2016/17 para dar sostén a los precios y la recomendación para que nuestro país se reinserte en el mundo haciendo lo que más sabe: proveer al segmento de 12,5% base seca, son todos temas que aborda el especialista en este imprescindible sobre la realidad actual del mercado triguero. |
1 - Los precios de trigo en Chicago tocaron su nivel más bajo en los últimos diez años, ¿a qué se debe eso?
En
primer lugar cabe aclarar previo a la respuesta que seguir insistiendo
que Chicago es el referente del mercado mundial de trigo nos conducirá
estructuralmente al error. En promedio de 90/91 a 00/01, un año antes
del ingreso del trigo ruso a la escena mundial, Estados Unidos
representaba el 32% del market share mundial, y Rusia en 01/02, tan sólo
el 4%. En 15/16, campaña finalizada el 30 de junio pasado, los US
terminaron con 13% del mercado, y Rusia con 16%. Si sumamos a Ucrania y a
Kazakstán, el Mar Negro totaliza un 31% del mercado, es decir casi el
mismo tercio que detenía Estados Unidos en los 90’. Rusia no se va a
convertir en el primer exportador mundial de trigo en 16/17 como leemos
erróneamente en estos últimos días, sino que ya se transformó en el
primer exportador mundial en 15/16 delante de Estados Unidos y de
Francia, si consideramos los intercambios intracomunitarios. Y esto no
fue magia. El Estado ruso planificó a través de su plan estratégico
lanzado en 08/09, junto con el sector privado federado a través de
Russian Grain Union, en convertirse en el primer país exportador mundial
de trigo en 20/21. Finalmente lo lograron en 15/16. Esto tiene
implicancias enormes en el mercado mundial. Tanto Rusia como Ucrania,
por razones de orden logístico, liquidan más del 70% de sus saldos
exportables entre julio y diciembre, antes de que se congele
recurrentemente el mar de Azov y el arribo de las fiestas ortodoxas, lo
cual orienta estructuralmente el mercado mundial de manera bajista en el
primer semestre de la campaña comercial, máxime cuando las cosechas son
históricas como lo es este año.
Con una
cosecha prevista en 73 M ton contra 61 M ton el año pasado, las primeras
ofertas de trigo ruso en julio de este año fueron de 162 USD FOB para
12,5% de proteína (11% base húmeda argentina). Hay que retrotraerse a la
campaña 09/10 para encontrar precios FOB tan competitivos. En resumen,
lo dicho hasta aquí demuestra que en la primera mitad de la campaña
comercial hemisferio norte hay que ver más lo que pasa en Moscú que en
Chicago. La segunda mitad de la campaña es estructuralmente otro cantar,
y es ahí donde Argentina se inserta en el mercado mundial. Y esto es
muy positivo para el origen argentino, volveré a ello luego.
Respecto
a tu pregunta, en fin dirán los lectores, los futuros de trigo en
Chicago cerraron en efecto el viernes pasado a mínimos en casi una
década, presionado por la abundancia de suministros (estamos hablando de
una cosecha de cereales de record absoluto de 2.069 M ton) y por
razones chartistas. Respecto al mercado físico americano, es evidente
que la voluntad de mover las existencias de trigo de invierno antes que
ingrese la cosecha de maíz presiona fuertemente los precios. En cuanto
al trade americano, cabe señalar que los stocks iniciales en US no paran
de aumentar, 16, 20,5 y 27 M ton en 14/15, 15/16 y 16/17,
respectivamente. Esto explica claramente por un lado la falta de
competitividad cumulada en estas últimas campañas del trigo americano y
por el otro la decisión individual de cada productor americano, que se
termina convirtiendo sin querer en una decisión colectiva, en vender el
trigo cuando más le conviene, esto gracias a la capacidad de almacenaje
con que cuenta Estados Unidos, y más bien los productores, única en el
mundo de más está decir.
Ahora bien, si nos
quedásemos sólo con el cierre de Chicago del viernes pasado estaríamos
omitiendo un elemento clave de este año que está desde ahora actuando
como driver, a saber la calidad de los trigos que se han cosechado en el
mundo hasta ahora. Tanto el mercado ruso como el europeo y el americano
han mostrado una cierta firmeza durante el mes de agosto, y ello es a
raíz de una caída de la proteína en los trigos de invierno tanto rusos
como americanos, y la fuerte reducción de la producción francesa
acompañada de graves problemas de peso específico de los granos.
La
degradación cualitativa no tiene el gatillo de orientación de precio
que tienen los inventarios, pero la misma puede llegar a modificar
sustancialmente los flujos exportables, y esto de por sí es de carácter
alcista.
2 - Esta
mejora en la oferta global de la que tanto se habla, con aumentos
importantes de producción en Rusia fundamentalmente, aunque también en
Estados Unidos, Canadá, quizás Australia, ¿tiene demanda? ¿De dónde va a
provenir? ¿Puede decirse que existen dos circuitos separados de
comercio de trigo internacional, uno de calidad y otro forrajero, o en
la práctica funcionan como un gran y único mercado?
No
existe “un mercado de trigo” sino “mercados de trigo” dado que el
mercado mundial de trigo es extremadamente segmentado por el sólo hecho
que el mismo no es un commodity: La calidad de trigo/s elegido/s
determina/n la harina producida adaptada a un determinado tipo de
panificación, y esto me da el pie para afirmar que el 80% del trigo
producido en el mundo lo es sencillamente para hacer pan (o todo tipo
de producto panificable para ser más riguroso). No hay por lo tanto
ningún país exportador que se fije como objetivo de producir trigo
forrajero, a elegir, el plus se da cuando se alcanza una determinada
calidad panadera, de manera tal que respecto al trigo forrajero su
producción responde más bien a una desclasificación de calidad que a una
estrategia deliberada de producir trigo forrajero. Esto no significa
que no exista un mercado de trigo forrajero, ni tampoco que no existan
variedades forrajeras, lo que quiero decir es que es un mercado acotado
en volumen ya que compite principalmente con el maíz y acotado a su vez
regionalmente en el sudeste asiático. Yo hablaría más bien de diversos
mercados de trigo por un lado y de un mercado forrajero global por el
otro, en el cual se incluye el trigo. Con la cebada no sucede lo mismo
ya que si bien la desclasificación de calidad es sumamente perjudicial y
costosa, existe un mercado forrajero específico por el mero hecho que
los camélidos toleran difícilmente otras raciones.
Resulta
imposible en breves líneas explicar de qué manera opera la segmentación
de la demanda a nivel mundial. La originación que se realiza en África
del oeste no es la misma que en el Magreb (Argelia, Marruecos y Túnez), y
dentro del Magreb la originación es muy diferente. Para complicar las
cosas Libia y Egipto, por ejemplo, pertenecen a África del norte pero
respecto a la estructuración de sus mercados estos corresponden más bien
al Próximo y Medio Oriente. En líneas muy pero muy generales que
conserva una cierta homogeneidad, habría que referirse a una demanda
latinoamericana, a cuatro demandas en el seno del continente africano, a
una demanda Próximo y Medio Oriente y tres demandas asiáticas.
Respecto
a la pregunta si los excedentes registrados este año tienen demanda,
hay que aclarar que desde la campaña 13/14 hasta la corriente 16/17 la
producción se encuentra por encima del consumo a nivel mundial. No
obstante, de 13/14 a 16/17 (prevista al día de hoy) la producción creció
un 3,6% y el consumo 4,7%, es decir que el consumo está creciendo
independientemente de la producción por razones más bien demográficas, y
digo independientemente de la producción ya que si bien los inventarios
abultados implican en principio una mejora en los precios para el
utilizador final, el consumo de trigo por habitante por año tiene un
límite: “no vamos a comernos diez hamburguesas porque están baratas…”,
de manera tal que si el hemisferio sur no juega una mala pasada
climática este año, los stocks tenderán a subir inexorablemente.
3 - ¿Qué
papel jugará los graves problemas productivos que ha tenido la Unión
Europea, mayormente Francia? ¿Abre nuevos mercados potenciales al trigo
argentino? ¿Tenemos posibilidades de aumentar la penetración en África?
Lo
que sucedió en Europa este año es un fenómeno muy particular. Francia,
que tomando los intercambios intracomunitarios, tuvo el segundo puesto
de exportador de trigo junto con Estados Unidos, este año se encuentra
con una caída de un tercio de su producción respecto a 15/16, si bien
esta fue un récord, hay que decirlo. Hay que remontarse a cuarenta años
(la famosa cosecha 1976) para igualar tan bajos rindes. A su vez, según
FranceAgriMer, organismo perteneciente al Ministerio de Agricultura, los
últimos resultados de encuestas de calidad al ingreso de acopios
arrojan que sólo el 23% de la colecta presenta pesos específicos por
encima de 76 kg/hl. Consecuentemente, las exports francesas caerán de
manera significativa en 16/17. No obstante, ello no se traduce en los
precios en el mercado local, es lo que se denomina localmente “doble
pena” ya que los productores franceses afrontan rendimientos
catastróficos acompañados de precios históricamente deprimidos. ¿Por
qué? Porque los países europeos del Mar Negro, es decir Rumania y
Bulgaria, presentan cosechas excelentes y calidad más bien buena, los
países bálticos, en plena cosecha, están presentando buenos rindes, y el
segundo exportador de trigo europeo, Alemania, presenta caída de
volumen y calidad muy ligera. Del Mar Negro propiamente dicho ya hablé,
de manera tal que sobra trigo en Europa para remplazar el origen
francés, y esto no es para nada alcista.
Ahora
bien, esto releva de una foto a un momento determinado, ya que el
problema de la lectura de los inventarios, podríamos decir lo mismo con
los charts, es que representa una foto en un momento determinado,
mientras que los flujos comerciales lo que menos tienen es imagen sino
más bien un puro dinamismo.
Siempre que se remplaza en el trade de manera abrupta un origen por otro siempre a implicancia en los precios.
Francia
deja de exportar en 16/17 casi 9 millones de toneladas, se sabe
matemáticamente que trigo hay y de sobra para remplazarlo, lo que se
desconoce es de qué manera, cuándo, con que timing, en definitiva, se
remplazarán esas 9 M ton. Francia revela año tras año una logística
impecable en la cuenca mediterránea, son años de relaciones comerciales
basadas en la proximidad geográfica y cultural, no es tal el caso de los
demás orígenes. De manera tal que, paradójicamente, el exceso mal
repartido este año puede ser una fuente de alza de precios.
Respecto
a la Argentina, el acceder seis meses después al mercado presenta una
gran ventaja luego de la fuerte competencia que se libraron básicamente
los europeos entre ellos. Resta saber cuál será la actitud comercial de
los Estados Unidos este año ya que la misma será un termómetro mayor de
la futura orientación de precios, sobre todo en la segunda mitad de
campaña.
En 08/09 y 09/10 los farmers guardaron
literalmente sus cosechas con el ánimo de no convalidar esos precios
que les imponía básicamente Rusia, lo que les permitió luego tapar el
agujero, junto con Francia, que Rusia dejó en 2010/11 a raíz del embargo
de las exports rusas que tuvo lugar en agosto de 2010.
Hoy
la cosa cambió. Los americanos almacenaron dos años de manera
consecutiva buena parte de la cosecha a fin de no convalidar, una vez
más, precios de morondanga, con la salvedad que este año no hay embargo
ruso, sino todo lo contrario. La competencia en 16/17 será feroz.
Argentina
tiene chances de colocar trigo en África del norte, de hecho el mismo
es conocido en tanto que origen más bien corrector por gozar de la
reputación de trigo “hard” equivalente al trigo duro de invierno
americano.
Ahora bien, el trigo argentino se
enfrentará, luego de tantos años de ausencia, a un mercado norte
africano en el cual 18 orígenes compiten por el mismo objetivo: vender.
Lo
que cambió respecto a los años en que el trigo argentino estaba
presente, es que se sumaron orígenes bálticos tales como Lituania,
Letonia, Estonia, Polonia, Suecia y países de Europa del este, que gran
parte de ambos producen trigos de alta proteína.
El
trigo argentino deberá competir en un mercado mundial frente a trigos
de 12,5% (base seca 10,8% base húmeda 13,5%) que carecen de todo tipo de
prima para lograr ese tenor proteico.
4 - En
Argentina, ¿cómo viene el mercado de trigo? Inicialmente se hablaba de
un aumento en las siembras hasta los 4,6 millones de hectáreas, hoy se
cree que eso podría pecar de optimista, y las coberturas se piensan algo
por debajo. ¿Cuál es su visión?
Aún
ciertas fuentes privadas hablan al día de hoy de esa superficie a la
cual se refieren, es más, el USDA sigue trabajando con un área cosechada
para argentina de 4,8 M ha, por cierto 0,4 M ha por debajo del
Ministerio de Agroindustria.
Si bien las
diferentes fuentes locales difieren sensiblemente respecto al área
sembrada, observo que la mayoría coincide en que el aumento de área
respecto al año anterior no superó el 20%. Esto me parece bastante
pertinente. La intención de siembra inicial era porcentualmente mayor
pero lamentablemente las condiciones climáticas en ciertos plots no
ayudaron. No obstante el área de trigo en Argentina crece de manera
significativa y es eso es extremadamente positivo.
Aquí
no nos damos cuenta de los que representa un aumento de área de un 20%.
En Francia en octubre/noviembre pasado (campaña 16/17) se reveló a
nivel mediático “un aumento significativo del área de trigo”, cuando
vemos en términos porcentuales lo que representa este aumento: 1,6%,
vemos que la referencia no es la misma.
5 - De
cualquier modo, descontamos desde ya un aumento de la producción de
trigo argentino en la nueva campaña. ¿Hacia dónde se destinará?
¿Encontrará demanda que la sostenga? ¿Cuál es su perspectiva para los
precios?
Totalmente. Si vemos diversas
previsiones el aumento de la producción superaría de un cuarto respecto
a 15/16, lo que generará saldos exportables bien por encima de lo que
estábamos acostumbrados durante los años de intervención del mercado de
trigo. Lo que hay que aclarar es que al 01 de diciembre próximo
arrancaremos con un stock bien inferior al registrado al 01/12/15, con
lo cual en términos de saldo, podríamos andar en 8/9 M ton, similar a
15/16.
Seguramente, clima mediante, la calidad,
nótese allí % de proteína, aumentará lo suficiente para abastecer a
Brasil y otros mercados latinoamericanos, africanos y próximos
orientales.
Argentina tiene que reposicionarse
en el segmento de 12,5% base seca a fin de atender el conjunto de
necesidades del mercado y sobre todo lo que se le exige al origen
argentino y no necesariamente a otros: ser corrector.
Y
para ello no nos van a bonificar, de lo que se trata no es del premio
(exceptuando los trigos 30/300 que localmente siempre lo tendrán) sino
de evitar el castigo, que a título de ejemplo este año superó los 30
USD/t. Ese castigo de 30 USD no fue a parar al bolsillo de ningún
eslabón particular de la cadena, se lo llevó puesto el mercado de la
perdida absoluta de ganancia de todos los sectores. Es eso lo que hay
que evitar de ahora en más.
* Leandro Pierbattisti se desempeña como asesor de la Federación de Acopiadores de Granos de la República Argentina.
Le agradecemos profundamente a Leandro su colaboración con esta entrevista.
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