A
punto de dar el punta pie inicial de una nueva campaña de granos
gruesos, con las sembradoras de maíz listas para arrancar la siembra, el
GEA de la Bolsa de Comercio de Rosario conversó con el Dr. José Luis
Aiello. Nos advirtió que la primera quincena de setiembre
vamos a estar con lluvias por debajo de lo esperado, que el cambio
climático sigue actuando, metiéndole un condimento extra de volatilidad
al sistema climático, y que La Niña, a pesar de que actuará con baja
intensidad, puede tener severos pulsos secos. De hecho ya advierte que
en soja y maíz la región del Mercosur estará por debajo de sus rindes de
referencia en la campaña que se inicia.
—José
Luis, se nos viene encima la siembra de maíz, y hay muchas expectativas
acerca de que las lluvias lleguen a tiempo pero también de que no se
pasen y vuelvan los excesos. Venimos de semanas más estables pero con
grandes cambios de temperaturas. ¿Qué se puede esperar de setiembre
respecto a precipitaciones?
—Durante la primera quincena las lluvias van a estar por debajo de los valores normales excepto en el NEA.
En la segunda quincena, debemos esperar a que la atmósfera tenga el
contenido de humedad que permita traducir en ofertas de agua al pasaje
de los frentes fríos que ingresen. Este es el principal mecanismo que
tiene la dinámica atmosférica. A grandes rasgos, el mejor escenario sería una activación a partir del 10 de septiembre.
—De
la Niña que nos aguarda para esta campaña, muchos piensan que no va a
ser la gran cosa, pero sé que vos no estás confiado en que sea tan
inocente cómo parece. ¿Cómo son los indicadores actuales? ¿Cómo puede
impactar en Argentina?
— La intensidad de la Niña que se instalará durante el trimestre actual va a ser de muy poca intensidad. Eso
es así, pero como vos decís, nosotros somos muy cuidadosos en el
análisis de éste extraordinario fenómeno del Pacífico dado que, aún bajo
condiciones de bajo enfriamiento en el Pacífico Ecuatorial Central se
inhiben los mecanismos de flujo de humedad desde el norte durante el
semestre cálido (octubre-marzo). Habiendo analizado todas las Niñas del
periodo de los últimos 30 años, (1986-2015) hemos observado que eventos como el actual han generado pulsos secos de buena intensidad, con lo cual hay que ser muy cautos y pensar que no estamos en el mejor escenario de gran escala. Y como siempre, los fenómenos regionales que aparezcan durante el verano van a definir la cuestión.
—Hablamos
mucho del cambio climático hace un año atrás, y mirando ahora los
acontecimientos con el diario ayer, tus advertencias sobre su fuerte
acción y el cambio en el régimen pluviométrico se cumplieron a
rajatabla, con todos los problemas de excesos que comentamos. ¿Cómo
podría estar afectando el CC en especial en este verano? ¿La acción del
cambio climático se espera que se acentúe?
—El
CC, que lo hemos incorporado en muchos de nuestros análisis, actúa
generando mayor volatilidad en las variables atmosféricas como son la
lluvia, la temperatura o la intensidad de vientos. Esto genera anomalías
en el comportamiento de las mismas que se traducen en pulsos muy secos o húmedos de corta duración pero de mucha intensidad. Conforme
coincidan con diversos períodos fenológicos de los cultivos, producen
consecuencias no deseables, como lluvias convectivas que ponen montos
mayores de 100 mm en horas y fenómenos asociados a intensos vientos.
Este comportamiento va a continuar durante los próximos años
y la receta es: tomar un seguro climático. Ese es el escenario bajo el
cual se va a desarrollar la producción agrícola en el futuro.
—Las
altas temperaturas que hemos tenido y las grandes variaciones que se
han manifestado en este último año, están influenciadas por el CC?
—Sin
dudas, hay muchas mediciones y análisis en distintas regiones del
planeta que así lo confirman. También a este calentamiento que está
sufriendo el planeta tierra se le "agregan" apariciones de pulsos fríos
de corta duración, y a esto me refería cuando te hablaba de la alta
volatilidad
—Con
estos indicadores que seguís tan de cerca, ¿cómo pensás que va a
desarrollarse la campaña gruesa? ¿Ves algo que te inquiete y que podría
meternos en un escenario de sequía grave?
Tu pregunta es muy interesante y clave. El
desarrollo de la cosecha gruesa va a sufrir durante los meses de fines
de primavera y verano, algunos eventos de pulsos secos. La
instalación de los mismos y la concordancia o no con los períodos
críticos de los cultivos, definirá la merma de rendimiento. En gran
escala, tomando el Mercosur, nos enfrentamos con una cosecha gruesa que terminará con rendimientos por debajo de la tendencia.
O sea, la mayor probabilidad de niveles de producción se ubicaría por
debajo de los esperados para cultivos como la soja y el maíz. Ya en
escalas a nivel de subregiones, habrá que ver cómo funcionan los
fenómenos regionales, de ahí que se va a tornar muy relevante los
trabajos de monitoreo de los cultivos y su interacción con el clima.
Este es el trabajo que se viene haciendo en GEA, en las últimas
campañas, gracias a su sistema de mediciones en toda la región núcleo.
Te lo pongo simple: van a tener mucho trabajo de ahora en adelante.