Maíz: se sembrará la mayor superficie en 16 años

Se implantarán casi 40.000 hectáreas más de maíz, lo cual es una buena noticia.

El nuevo escenario económico para los granos en la Argentina estimula a los productores a incrementar las hectáreas destinadas al cereal. La Bolsa de Cereales de Entre Ríos informó que la intención de siembra supera el área concretada en la campaña 2015/16 y la superficie de maíz de primera y de segunda podría sumar un total de 250.000 hectáreas en el presente ciclo, contra las 210.600 que se sembraron en la campaña anterior. A nivel nacional el aumento de área legaría al 25%.

Con la implantación de los primeros lotes, la campaña de maíz 2016/17 dio comienzo en la provincia con la novedad –ponderable, por cierto– de que el área crecerá, en sintonía con lo que sucederá en el resto del país.

El nuevo escenario económico de la agricultura, luego de la eliminación de las retenciones y el fin de las trabas a la exportación, cambiaron el estado de ánimo de los productores agrícolas y las primeras estimaciones hablan un aumento de la superficie sembrada con maíz cercana al 20% en la provincia y del 25% a nivel nacional.

La Bolsa de Cereales de Entre Ríos, a través de su Sistema de Información (Siber), en este sentido, reportó que la intención de siembra supera el área concretada en la campaña 2015/16 y la superficie de maíz de primera y de segunda podría sumar un total de 250.000 hectáreas en el presente ciclo, contra las 210.600 que se sembraron en la campaña anterior; es decir unas 39.400 hectáreas más que en términos porcentuales representan un crecimiento de entre el 18 y 19%.

La falta de humedad en el suelo, sin embargo, podría ser una limitante para la concreción de este incremento.


A nivel nacional

Mientras, los relevamientos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires marcan una tendencia positiva en la intención de siembra del maíz.

“Esta tendencia se da en toda el área agrícola nacional, aunque el porcentaje de incremento es variable en cada zona. En parte de estas zonas, el aumento de superficie estaría acompañado de un incremento en el nivel de tecnología aplicado. Por otro lado, se comienzan a relevar intenciones de cambios en la relación de siembras tempranas/siembras tardías y de segunda ocupación; parte de este cambio se encuentra vinculado a las muy buenas reservas de humedad en los perfiles con que comenzaría la siembra en el centro del país”, señala el informe de precampaña de maíz elaborado por la Bolsa porteña.

Frente a este panorama, la superficie prevista para el nuevo ciclo 2016/17 podría alcanzar las 4.500.000 hectáreas, cifra que refleja un incremento interanual del 25 % (Superficie Maíz 2015/16: 3,6 MHa) y se ubicaría como la más alta de las últimas 16 campañas). Los mayores incrementos de área se encuentran sobre las zonas Centro-Norte y Sur de Córdoba, Centro-Norte de Santa Fe, Núcleo Norte y Sur. A medida que transcurra la ventana de siembra del cereal, esta primera proyección podría sufrir modificaciones en función de la evolución tanto del clima como del marco económico/productivo del sector.

Nuevos escenarios

Uno de los principales factores que generaría un aumento del área a sembrar la campaña 2016/17, remarca el informe de la Bolsa de Buenos Aires, es la disminución de los rendimientos de indiferencia del cereal, los cuales son calculados a partir de la relación entre el precio de mercado del cereal y sus costos de producción.

Dentro de los costos de producción, agrega, los fertilizantes y semillas son los que muestran el mejor ratio insumo/producto; en cambio variables como el costo de los fletes y los arrendamientos ponen cota al aumento de área en zonas marginales.

Junto con la mayor intención de siembra, también se sumaría un aumento en el nivel tecnológico aplicado en los planteos. Este incremento estaría dado en la elección de materiales de siembra, como en modificaciones de los esquemas de fertilización y manejo fitosanitario. Tanto los fertilizantes nitrogenados, como contar con semillas de híbridos y calibres específicos, son elementos de gran relevancia dentro de los esquemas productivos que apuntan a altos rendimientos.

Otro factor positivo para el cereal está dado por la superficie no cubierta por cultivos de fina en diversos sectores del país. Los excesos hídricos durante la ventana de siembra de trigo y cebada, provocaron que parte de los cuadros presupuestados pasaran a gruesa siendo el maíz y el girasol dos de los cultivos que podrían ocupar estos lotes libres.

Desde el punto de vista técnico, hay una serie de factores que apuntalan la siembra de maíz. Por un lado, luego de varias campañas con una preponderancia de oleaginosas en las rotaciones, el cereal permite comenzar a balancear la ecuación. Además, el cultivo es una herramienta fundamental para los esquemas de manejo de malezas tolerantes/resistentes y permite recuperar parte de la fertilidad física de los suelos. No obstante “los retrasos de la cosecha de la actual campaña de maíz 2015/16, podría afectar negativamente su siembra. A partir del comienzo del otoño, las condiciones de mal tiempo que afectaron gran parte del área agrícola nacional y la alta humedad de los granos mantienen una gran cantidad de lotes aún en pie. Esta realidad, no permite cerrar parte de los contratos de alquileres demorando el inicio de los barbechos para el cereal”, agrega la Bolsa porteña.

Clima

Los niveles de las reservas hídricas en el centro del área agrícola nacional son de adecuados a excelentes, señala el informe de precampaña. Los registros pluviométricos del otoño y parte del invierno, complicaron las labores de recolección de la actual campaña pero aseguraron importantes reservas hídricas para el nuevo ciclo. Estas reservas “permitirían realizar de manera adecuada la siembra de lotes tempranos, particularmente en las zonas Centro-Este de Entre Ríos, Centro-Norte de Santa Fe, Núcleo Norte y Sur. En estas áreas las siembras tempranas históricamente superan a los planteos tardíos o de segunda ocupación, relación que crecería aún más durante la próxima campaña buscando mayores rendimientos potenciales”, añade el trabajo de la Bolsa porteña.

A pesar de este escenario inicial, según el informe agroclimático estacional de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, “lentamente comienza a configurarse un posible fenómeno de La Niña a partir del verano aunque de manera leve dado los efectos residuales del actual Niño. La evolución de las anomalías de la precipitación prevista para la campaña 2016/17, muestran evoluciones dispares en función del área analizada. Por un lado la región del NOA y parte del NEA, podrían tener muy buenos registros de lluvia apuntalando la siembra de maíz. Diferente es el caso de la margen oeste del área agrícola nacional, donde la posible disminución de los registros pluviométricos durante el verano promovería los planteos de siembras tardías en detrimento de las tempranas buscando la estabilidad de los rendimientos”.

El Siber, en este sentido, señala en su último reporte semanal que la situación de las reserva de humedad en Entre Ríos ha desmejorado. Sin embargo, el nivel adecuado de humedad en el perfil de suelo todavía predomina. “Sin dudas que las deficiencias superficiales son más notorias e incluso pueden estar jugando un rol limitante en las tareas de siembras tempranas de maíz”, considera el Siber.


La producción maicera 2015/16 en Entre Ríos trepó a 1.217.680 toneladas

El Sistema de Información de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos (Siber) dio a conocer el informe correspondiente a la producción de maíz del ciclo agrícola 2015/16.

Los parámetros productivos del ciclo 15/16 han presentado una variación negativa, si se compara con la campaña 2014/15. Los indicadores productivos parten de una reducción en la superficie sembrada de 41.500 ha menos (-16%) que el año anterior, sumado a una baja en el rendimiento promedio (152 kg/ha, es decir un -2%) que influyó directamente en la producción del cereal, es decir hubo una merma de 326.205 tn (-21%).

Del análisis de las últimas 16 campañas, en Entre Ríos se observa que la media histórica de hectáreas dedicadas al maíz oscila en las 200.367 ha por año, mientras que en el último ciclo superó este valor promedio en alrededor de 10.000 ha.

En tanto, el comportamiento de la producción en el ciclo 15/16 fue mayor al promedio alcanzado en el período analizado, es decir el valor promedio en 16 años es de 1.062.746 tn.

El maíz de primera ocupó el 87% del área sembrada y el 90% de la producción total, mientras que el maíz tardío y/o de incluyó el 13% de la superficie y el 10% de la producción.

La superficie no cosechada hace referencia al maíz con destino a elaboración de silo y grano húmedo, que suma un total de 24.600 ha.

Los números del maíz 2015/16 Superficie Total Sembrada: 210.600 hectáreas (ha)
Superficie No Cosechada: 24.600 ha
Superficie Cosechada: 186.000 ha
Rinde Promedio Provincial: 6.597 kg/ha
Producción Total: 1.217.680 toneladas (tn)