Chicago: sigue jugando fuerte la prima climática

Dante Romano
Las próximas semanas serán clave para definir parte de la campaña sojera en Estados Unidos, y el mercado sigue mostrando volatilidad. 
 
El mercado de granos sigue concentrado en la marcha del clima en Norteamérica, que hasta aquí funcionó muy bien, y se juega en agosto la última bola. Con la floración de maíz prácticamente completada en condiciones favorables, hay poco espacio para sorpresas. Pero en el caso de la soja, estamos a mitad de camino y el suspenso persiste. Por esto el mercado sigue con cierto nivel de prima climática, que va subiendo y bajando al son de los pronósticos.
Esta semana el clima venía mostrándose ideal para los cultivos. De hecho, a pesar de haber tenido que soportar la semana previa algunos días de mucho calor, la calidad de los cultivos se sostuvo en niveles elevados. Sin embargo, sobre el jueves las perspectivas se volvieron más cálidas y secas, inspirando un rebote, continuando en un entorno de alta volatilidad.
Es importante entender que una variación de 1 qq/ha de rinde se multiplica por 33 millones de hectáreas de soja y 34 millones de hectáreas de maíz, lo que hace a los stocks bajar a niveles de racionamiento o bien, en el caso de soja, que en vez de bajar frente a la campaña previa, terminen igualando o subiendo, y que el maíz extienda sus existencia a niveles récord, presionando precios a la baja.
En el mientras tanto, actualmente hay muy poca oferta mundial de maíz disponible. Brasil debería ser un abastecedor fuerte en este momento, pero eso no ocurre por los problemas climáticos que se llevaron unos 10 millones de toneladas. En nuestro país hay problemas para cubrir los embarques ya anotados, pero los compradores pujan por mercadería a septiembre, apostando a que se agilice la situación logística más adelante. Sin embargo, todos saben que en unos meses más el mercado que debería aportar la oferta faltante es Norteamérica, que como dijimos se encamina a un incremento de stocks importante. Sin embargo, en el corto plazo, ellos están con una demanda doméstica también activa, que evita que la mercadería de la cosecha 15/16 fluya al exterior, a pesar de haber sido de todas formas muy voluminosa. Por esto el premio de exportación es inusualmente alto.
Por el lado del trigo, el nivel de oferta es muy elevado y genera precios debilitados. Sin embargo en Chicago los especuladores tomaron una posición tan vendida que genera la posibilidad de subas técnicas.
Pero para que las compras técnicas se produzcan, se necesita un disparador. El mismo ha sido esta última semana las perspectivas de menor producción europea. De todas formas, Rusia y Ucrania vienen con muy buenas perspectivas de producción de trigo y esto podría empatar con la baja de oferta del Viejo Continente.
Pero como siempre decimos, el trigo tiene un mercado más bien regional. Entre el consumo interno de la Argentina de unos 6,5 millones de toneladas y las necesidades de Brasil de unas 6 adicionales y algo más del resto de los países latinoamericanos, hay una demanda asegurada de unas 13 millones de toneladas. 
En tanto, la producción de este año apuntaba a 15 millones de toneladas, pero hay serios atrasos en la siembra. Por eso se viene reduciendo la superficie a implantar todas las semanas, y de todas las formas, el avance semanal de siembra sigue siendo leve.
Esto ocurre porque los suelos están muy húmedos, queda todavía mucho maíz y algo de soja por trillar, y esto nos hace pensar que vamos a ir incluso a un área menor. Es por esto que la posición enero se va fortaleciendo.
En cuanto al maíz local, el atraso de cosecha y las dificultades para sacar la mercadería de los campos han hecho que julio cerrará todavía con muy poco nivel de oferta y muchos negocios sin cumplir. Sin embargo es positivo que en la última semana la descarga se haya activado.
En soja las ventas de productores prácticamente se frenaron. La industria necesita la mercadería y por esto está trasladando precios por demás interesantes frente al valor de noviembre y frente a Chicago.
Por eso tanto para maíz como para soja la relación con Chicago se encuentra con descuentos muy bajos. Es tentador cerrar negocios a fijar por ese mercado, pero siendo conscientes de que este mercado se pone interesante generalmente cuando viene el rebote alcista.