Salió el sol y la soja aceleró a fondo. Sergio Persoglia

7 días por el campo.
Con una semana de buen tiempo, se retomó la trilla y la cadena agrícola vuelve a respirar. En ese marco, Macri visitó la Bolsa de Cereales porteña.

Como adelantaban los pronósticos climáticos, una semana casi entera de buen clima se instaló sobre las principales regiones productivas argentinas, lo que permitió un fuerte avance de la cosecha de soja, que venía seriamente demorada por el largo temporal de abril.
 
Aunque el atraso persiste y los daños son inevitables, varios indicadores muestran que la situación se están recomponiendo a nivel general, aunque, está claro, persisten muchas dificultades y hay, incluso, quienes han perdido todo.
 
Más allá de los precios entonados para la oleaginosa (que reflejan, justamente, los problemas de la cosecha), hay otras cifras que muestran el camino de la “normalización”.
 
Por ejemplo, el de ingreso de camiones cargados con soja a los puertos: ayer viernes había para descargar en las terminales 4.447 camiones, casi un 50% más que una semana antes, cuando “apenas” esperaban su turno 3.068.
 
El número exhibe que en los últimos días se pudo transitar mejor por los caminos rurales y que las cosechadoras se encontraron con “piso suficiente” para entrar a los lotes y trillar.
 
Los recortes en la producción, de todas maneras, son evidentes, aunque no todos se ponen de acuerdo en la dimensión que tendrá. Un informe comparativo que elaboró la firma corredora Enrique R. Zeni precisa que los menos optimistas son los técnicos de la Bolsa de Comercio de Rosario, que calculan una cosecha sojera de 55 millones de toneladas. Los más optimistas son los del Ministerio de Agroindustria de La Nación, que todavía hablan de una cosecha de 57,6 millones de toneladas. En el medio están los expertos de la Bolsa de Cereales porteña, que piensan en 56 millones de toneladas.

Justamente en la entidad cerealera de Buenos Aires hizo pie el jueves por la noche el presidente Mauricio Macri. El titular de la entidad anftriona, que festejaba su 162° aniversario, Ricardo Valderrama, aprovechó la ocasión para hacer una defensa del peso de la cadena agrícola en la economía argentina y para anunciar que, más allá de los vaivenes climáticos que siempre afectan a la actividad, la Bolsa se lanzará cada año a hacer un acto formal de apertura de la campaña agrícola, como se hace en otros países, para realzar la importancia que el hecho tiene para el país.
 
“Estamos convencidos de que se trata de un acontencimiento que merece ser celebrado, porque simboliza la apuesta permanente de los hombres y mujeres de la agroindustria argentina”, dijo Valderrama. Y recordó que los sectores nucleados en la entidad presentan los indicadores más favorables de toda la economía. “Nuestra Bolsa registra anualmente operaciones por un volumen de 24 millones de toneladas, con un valor de 5.000 millones de dólares. En nuestro Mercado a Término se realizan operaciones por casi 30 millones de toneladas, por un valor de más de 6.000 millones de dólares”, sacó pecho.
 
Son datos que muestran que la cadena agrícola argentina está viva, más allá del impacto innegable del temporal. Con un contexto macroeconómico distinto al de los últimos años, como recordó Macri durante el acto, tiene viento a favor para un crecimiento sostenido en los próximos años.