Nuevo ciclo: pintar a Córdoba de verde. Dr. Sergio Busso

Una mirada integral conduce a pensar en soluciones agronómicas, con gramíneas y pasturas en el sistema.
Días atrás, en el marco de las sucesivas reuniones que se vienen desarrollando con los productores que están sufriendo las consecuencias de los anegamientos, tuvimos la oportunidad de confluir en Marcos Juárez, San Francisco y Morteros con el ministro de Agroindustria de la Nación, Ricardo Buryaile, y parte de su equipo.
Allí, con la presencia de hombres de campo que saben bien de qué se trata esto de producir y trabajar la tierra, coincidimos en que al margen de las soluciones más urgentes que deben darse para hacer frente a la problemática de los excesos hídricos (caminos, infraestructura, financiamiento) la mirada integral conduce también a pensar en soluciones agronómicas.
En esto, entidades como el Inta van a la cabeza de los estudios y documentos que argumentan sólidamente esta necesidad de incentivar, por ejemplo, los cultivos de invierno. Se suman las casas de altos estudios, organizaciones de profesionales y diversas entidades del sector. Haciendo un poco más de memoria, ya en febrero –y a raíz de intercambios con la Nación– se comenzó a hablar de este concepto.
Ideas fuerza. ¿Y qué significa “pintar Córdoba de verde”? Básicamente, promover la siembra de cultivos y pasturas invernales, gramíneas como el trigo para grano (las estimaciones indican un gran crecimiento de este cereal para la nueva campaña), la cebada o el centeno.
Incentivar también cultivos de cobertura, verdeos y leguminosas invernales como el garbanzo. ¿Por qué? Porque constituyen un verdadero arsenal para el incremento de los consumos hídricos.
En períodos excepcionales como el que atravesamos, con promedios de milimetrajes muy por encima de lo normal, y con una situación que ya trae de arrastre niveles freáticos complicados, se vuelve indispensable hacer uso de todos los mecanismos a nuestro alcance para revertir este desequilibrio hídrico.
Emergencia en el este. El martes de esta semana, con gran parte del equipo de trabajo del Ministerio de Agricultura y Ganadería, visitamos las localidades de Porteña y Altos de Chipión, en el departamento San Justo.
En esa zona también la Provincia tuvo que declarar el estado de emergencia agropecuaria por los excesos hídricos.
Allí, a modo de introducción, expusimos a los productores un diagnóstico de la situación actual que se atraviesa en grandes áreas de la zona núcleo.
Las causas del agua en superficie son, por supuesto, las precipitaciones intensas, pero también los aportes de aguas provenientes de unidades geográficas más altas; las napas freáticas al tope, como consecuencia de una situación recurrente de excesos, y el cambio de uso de suelo. Con este panorama, el sistema no puede evacuar ni consumir los excedentes en lapsos cortos de tiempo.
Pensar a largo plazo. Por todo lo expresado surge esta traducción de un objetivo a un eslogan, si se quiere. Pintar Córdoba de verde es pensar a largo plazo; es continuar instaurando un modelo de producción que, con los beneficios económicos, traiga de la mano un desarrollo cada vez más sustentable; es frenar la erosión, es evitar la degradación porque los rastrojos son escasos. En definitiva, es generar beneficios ambientales y sociales.
Por distintas razones y en diferentes ambientes, como las zonas del norte provincial, este año allí también se tiene la oportunidad de pintar Córdoba de verde. No hay mejor manera de aportar soluciones a una problemática si las mismas conjugan productividad, cuidado de los recursos y visión sostenida en el tiempo.

Fuente: Agrovoz - Autor: Dr. Sergio Busso - Ministro de Agricultura y Ganadería de la provincia de Córdoba.