Llaman a ganaderos a inscribirse para poder criar novillos de exportación

Por las trabas al comercio exterior, muchos productores se dieron de baja de los registros del Senasa y rehabilitar esos permisos o anotarse por primera vez lleva, como mínimo, tres meses.



La decisión del gobierno de Mauricio Macri de quitar las retenciones que pesaban sobre las exportaciones de carne vacuna trajo un aire esperanzador para el sector ganadero y frigorífico argentino. Sin embargo, recuperar los daños de casi una década de comercio intervenido no será fácil ni se logrará en un corto plazo.

Un aspecto en el que se está trabajando por estos días, por ejemplo, es en ampliar la oferta de campos ganaderos aptos para vender animales a los frigoríficos exportadores. Es uno de los principales ejes de trabajo que la Asociación de Frigoríficos e Industriales de la Carne (Afic) está llevando a cada reunión de la que forma parte, como las que mantuvo recientemente con el ministro de Agricultura y Ganadería, Sergio Busso; o en el marco de la Mesa Asesora de Carne Bovina en las oficinas locales del Senasa.

Requisitos

“Hay que recordar que los campos, para poder vender hacienda de exportación, tienen que estar inscriptos específicamente en el Senasa y llevar una serie de registros especiales para mantenerse en esa categoría, de acuerdo a las exigencias de la Unión Europea. Si no, los frigoríficos exportadores no pueden comprarles”, explicó a Agrovoz el director Ejecutivo de Afic, Daniel Urcía.

Según Urcía, muchos productores se dieron de baja de este listado cuando el kirchnerismo intervino el mercado y afectó los precios, y ahora tienen intenciones de volver a engordar los novillos llevándolos a mayor peso para la exportación, pero si no se reinscriben van a tener que venderlos para el consumo interno, con un valor mucho más bajo.

“Muchos productores se dieron de baja porque si no había precio no convenía llevar tantos registros, tener que recibir auditorías. Pero ahora, cuando hay precio, no tienen problemas en tomar esa mayor dificultad. En el gobierno anterior uno dudaba que algo cambie; hoy, si el precio sube o baja va a ser sólo una circunstancia de mercado”, evaluó Urcía.

Plazos largos

Para el directivo de Afic, “hay ganaderos que tienen pensado en meterle más kilos (a los novillos), pero cuando tengan el animal terminado no van a tener el campo aprobado. Es algo que no se aprueba fácil, necesita visitas del Senasa, todo un tema que hace que demore no menos de tres meses”.

Allí es que Urcía hace referencia a la “pérdida” que puede tener el productor si no se anota por primera vez o se reinscribe. “Hoy los productores tienen buenas condiciones, por ejemplo climáticas, con mucho pasto que sale barato (N. de R: la Cuota Hilton no admite animales criados en feed lot). Hay margen para guardarse el novillo un tiempo más. Pero esa ganancia la van a rifar si terminan vendiendo el novillo pesado al mercado interno por no inscribirse ante el Senasa”, precisó.

El objetivo de las gestiones de Afic es simplifcar los procesos de registro para ampliar la oferta de hacienda para exportación, teniendo en cuenta que si el mercado exterior se reactiva como esperan desde la industria frigorífica, la oferta de animales que hay en el país es insuficiente.