La política del Banco Nación y la absorción del sector público, los factores.
Los créditos al campo son los que menos
vienen creciendo en términos de variación porcentual respecto de los
préstamos otorgados a otros rubros del sector privado, e incluso del
sector público, necesitado de caja tanto para sí como para las empresas
estatales.
Según un informe elaborado por Ezequiel
de Freijo, especialista del Instituto de Estudios Económicos y
Negociaciones Internacionales de la Sociedad Rural Argentina (SRA), de
diciembre de 2013 a junio pasado el volumen de préstamos al agro tuvo un
aumento nominal del 14%. En cambio, los otorgados a la industria
subieron 27%; a la construcción, 36%, y a las personas físicas en
relación de dependencia, un 32%, entre otros rubros.
Si se analiza el sector privado en su
conjunto, pero excluyendo al campo, los créditos subieron 30%, más del
doble en porcentaje de lo que crecieron los préstamos al agro, según el
informe.
El crédito al agro también quedó muy
relegado en la variación porcentual si se mira lo que ocurrió con los
sectores petróleo y minería y electricidad, muy vinculados a empresas
estatales o con regulación, como YPF y Caamesa, por ejemplo. La suma de
todos los activos financieros en poder de los bancos aumentó 56%, al
pasar de $ 1 billón a $ 1,6 billones, pero con un aumento de 115% en
petróleo y minería y un 60% en electricidad; estos sectores no sólo
superaron en porcentaje al agro, sino que avanzaron a una tasa superior
al promedio del 56% a la que lo hicieron todos los activos financieros.
De acuerdo con el estudio, los préstamos
al sector agropecuario aumentaron una cuarta parte de lo que lo hizo el
promedio de los activos financieros. En dinero, los créditos al campo
pasaron de $ 54.000 millones a $ 62.000 millones (+14%). Por su parte,
el promedio del sector privado, sin agro, trepó de $ 549.000 millones a $
711.000 millones (+30%).
En este contexto, De Freijo destacó que
"el 52% del incremento de los activos financieros lo captaron los
créditos otorgados al sector público, que aumentaron un 91% (de $
142.000 millones a $ 365.000 millones) y los títulos valores del BCRA,
que lo hicieron en un 158% (de $ 81.000 millones a $ 156.000 millones)".
¿Por qué crecieron menos los créditos al
agro? Según De Freijo, influyeron tres factores. En primer lugar, las
restricciones del Banco Nación a los productores que retienen soja. El
banco oficial, que venía siendo el principal prestamista al sector
agropecuario, congeló los montos prestables en pesos, como los acuerdos
de descubierto en cuenta corriente y los montos de la tarjeta de
crédito, entre otros puntos, a los valores de 2013.
En segundo lugar, en la menor variación
jugaron un rol importante las regulaciones al sector financiero, entre
ellas, según el analista, la imposición de una tasa mínima para los
plazos fijos minoristas, el establecimiento de una tasa máxima para los
préstamos al consumo y la obligación impuesta a los principales bancos
de prestar hasta un 7,5% de los depósitos a los sectores productivos.
En tercer lugar, también influyó la
presión que recibieron los bancos para colocar sus depósitos en títulos
públicos del BCRA, como Lebacs y otros.
"Toda esta combinación resultó en un
desincentivo por parte de los bancos a prestar el dinero a la actividad
productiva, sobre todo al campo, y en un incentivo adicional para que
ese dinero fuera a financiar el desajuste fiscal", explicó el experto de
la Rural, que agregó: "El déficit fiscal y las regulaciones al sistema
financiero les sacan financiamiento a las actividades productivas".
El analista alertó que esos "desajustes"
terminaron impactando en una suba de tasas que afectó al sector
productivo. "Como resultado de estos desajustes, la tasa de interés
promedio cobrada a todos los créditos en moneda local, para los cultivos
agrícolas de cereales, oleaginosas y forrajeras aumentó un 26% entre
septiembre de 2013 y junio de 2015, pasando de 24,2% a 30,4%" anual,
advirtió.
Sobre el final del trabajo, De Freijo
subrayó, en función de lo que sucedió con la evolución de los créditos,
que el sistema financiero local "está priorizando las necesidades de
caja del sector público y de las empresas estatizadas, antes que los
requerimientos financieros del sistema productivo argentino".
El sector más castigado. 62.000
- Son los millones de pesos otorgados en créditos al campo entre
diciembre de 2013 y junio de 2015, con un alza de 14%, según un
relevamiento de la Sociedad Rural.
365 - Son los miles de millones en préstamos que recibió el sector
público en el mismo período, lo que implica un incremento interanual
superior al 90%.115% - Es el incremento que registraron los créditos otorgados al petróleo y a la minería, que fueron los rubros privados que recibieron una mayor cantidad de fondos.
Fuente: Diario La Nación.