Finalizó
septiembre y en el área de influencia de la Bolsa de Cereales y
Productos de Bahía Blanca llega el momento de definir el cultivo a
sembrar en esta nueva campaña gruesa.
Por las diferencias climáticas, edáfica y financieras que presenta el
productor en dicha región, se analizaron escenarios representativos en
relación al manejo y al uso de tecnologías aplicadas en los cultivos de
verano
Para cada uno de los escenarios, se estima el Margen Bruto
(MB) el cual surge de la diferencia entre el Ingreso Neto y los Costos
Directos de cada actividad. El mismo brindará una orientación, según el
manejo y expectativa de rinde de cada productor, de cuál será laopción
más apropiada al momento de definir el cultivo a implantar.
Como
dato adicional se calcula el Rinde y Precio de Indiferencia, valores
mínimos para afrontar los costos directos. Complementariamente se brinda
el MB con arrendamiento, promediando un costo de alquiler de 6 qq de
trigo/ha. Finalmente como sucede en la mayoría de los productores de la
zona, los cuales deben buscar alternativas de financiación para la
realización de las labores y compra de insumos, se calcula el MB con
financiamiento, el mismo considera que la mitad de los costos directos,
son financiados a una tasa del 25%.
NÚMEROS HABLAN POR SÍ SÓLOS
Al
observar el siguiente cuadro, los números hablan por sí sólos, si al
margen bruto obtenido le sumamos los gastos de estructura, los
resultados económicos son muy justos. Peor situación se afronta si
contemplamos el alquiler del campo, frente a esta situación los números
son realmente delicados, excepto para el cultivo de maíz. DRÁSTICA CAÍDA DEL MARGEN BRUTO
En
el siguiente cuadro se observa la drástica caída del MB y precio, entre
esta campaña y la 2014-15 para cada uno de los cultivos (excepto el
sorgo). Si bien los costos directos no variaron significativamente (en
dólares) de un período al otro, la baja rentabilidad de los cultivos
estaría dada por el derrumbe general de los precios (entre un 15 y 20%). La
erosión de precio que sin duda afecta directamente al productor y en
forma indirecta a toda la cadena comercial, deja como resultado una gran
incertidumbre, hoy por hoy el productor no sabe si sembrar y qué
sembrar. Sumado a ello, la imposibilidad de comercializar su actual
producción y la falta de acceso a herramientas financieras, pone al
productor en un momento de grandes dificultades económicas para afrontar
la próxima campaña gruesa que, seguramente en caso de realizar la
siembra, el paquete tecnológico a aplicar será nuevamente a costos
mínimos (baja a nula fertilización).
Para observar las consideraciones de cada cultivo, acceda al informe completo.
Fuente: Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca