Liberen al trigo de baja proteína: se cumple un mes de la promesa incumplida de permitir la exportación de un producto sin demanda en el mercado interno
Argentina insólita.
El 16 de julio pasado el ministro de Agricultura Carlos Casamiquela y su par de Economía Axel Kicillof prometieron liberar un cupo de exportación de 500.000 toneladas de trigo de baja proteína. Pero hasta el momento eso no se efectivizó.
El trigo con un nivel proteico inferior a 10,5%, al no tener demanda en el mercado interno, está guardado en el campo desde enero pasado al no poder exportarse. Los principales perjudicados por tal medida son los integrantes de la cadena de valor agrícola bonaerense (provincia donde se concentra la producción argentina del cereal) y el propio gobierno nacional (urgido de generar divisas en un contexto económico local de escasez de dólares).
El FAS teórico del trigo baja proteína, con un FOB oficial (Minagri) de 198 u$s/tonelada con entrega en terminales portuarias bonaerenses, actualmente es del orden de 1260 $/tonelada.
Desde noviembre del año pasado a la fecha la Ucesci –organismo controlado por el secretario de Comercio Interior Augusto Costa– oficializó permisos de exportación (ROE) de trigo pan por 3,85 millones de toneladas, de trigo candeal por 65.000 toneladas y de trigo orgánico por 26.300 toneladas. Pero no se liberó una sola tonelada de trigo de baja proteína.
El saldo exportable total de trigo pan 2014/15 habilitado hasta el momento por el ministro de Economía Axel Kicillof es de 4,50 millones de toneladas, mientras que el Ministerio de Agricultura estima que el mismo es de 7,20 millones de toneladas.
A pesar de que el bloqueo exportador perjudica principalmente a los bonaerenses, el problema no forma parte de la agenda de trabajo del ministro de Asuntos Agrarios de esa provincia Alejandro “Topo” Rodríguez.
El último comunicado oficial del Ministro de Asuntos Agrarios bonaerense hace referencia a una visita del titular de ese organismo, Alejandro “Topo” Rodríguez, a Neuquén para ofrecer una “charla ante productores agropecuarios, empresarios y dirigentes políticos del Frente para la Victoria, en la que abordó la situación de los principales complejos productivos de la región, destacando la producción frutícola; ganadería, tanto ovina como caprina; y valorando también la significación que adquiere en la provincia el complejo petrolero y petroquímico, junto con el turismo”.
El trigo con un nivel proteico inferior a 10,5%, al no tener demanda en el mercado interno, está guardado en el campo desde enero pasado al no poder exportarse. Los principales perjudicados por tal medida son los integrantes de la cadena de valor agrícola bonaerense (provincia donde se concentra la producción argentina del cereal) y el propio gobierno nacional (urgido de generar divisas en un contexto económico local de escasez de dólares).
El FAS teórico del trigo baja proteína, con un FOB oficial (Minagri) de 198 u$s/tonelada con entrega en terminales portuarias bonaerenses, actualmente es del orden de 1260 $/tonelada.
Desde noviembre del año pasado a la fecha la Ucesci –organismo controlado por el secretario de Comercio Interior Augusto Costa– oficializó permisos de exportación (ROE) de trigo pan por 3,85 millones de toneladas, de trigo candeal por 65.000 toneladas y de trigo orgánico por 26.300 toneladas. Pero no se liberó una sola tonelada de trigo de baja proteína.
El saldo exportable total de trigo pan 2014/15 habilitado hasta el momento por el ministro de Economía Axel Kicillof es de 4,50 millones de toneladas, mientras que el Ministerio de Agricultura estima que el mismo es de 7,20 millones de toneladas.
A pesar de que el bloqueo exportador perjudica principalmente a los bonaerenses, el problema no forma parte de la agenda de trabajo del ministro de Asuntos Agrarios de esa provincia Alejandro “Topo” Rodríguez.
El último comunicado oficial del Ministro de Asuntos Agrarios bonaerense hace referencia a una visita del titular de ese organismo, Alejandro “Topo” Rodríguez, a Neuquén para ofrecer una “charla ante productores agropecuarios, empresarios y dirigentes políticos del Frente para la Victoria, en la que abordó la situación de los principales complejos productivos de la región, destacando la producción frutícola; ganadería, tanto ovina como caprina; y valorando también la significación que adquiere en la provincia el complejo petrolero y petroquímico, junto con el turismo”.