Los
lotes de maíz de segunda y tardíos de la región no consiguen bajar la
humedad del grano y las condiciones ambientales no son propicias para
que esto suceda. Las labores de cosecha se realizan con 2 a 4 puntos
extras de humedad respecto a los estándares de comercialización (14,5%) y
la secada suma más costos a un cultivo de muy baja rentabilidad. Por
esta razón, muchos productores optan esperar que seque el cultivo en pie
con el riesgo de desgrane y/o pérdida de calidad del grano. La zona más
complicada en el norte bonaerense donde la falta de piso deja
inhabilitada la cosecha y el descalce de la plantas por humedad del
suelo comienza a preocupar. El avance de siembra de trigo comprende el
84%. Los pocos lotes implantados con el cereal están en estadios
vegetativos tempranos y en buenas condiciones generales.
Avanza
muy lentamente la recolección de maíz tardío y de segunda. El avance
comprende un 64% del total sembrado en diciembre. Los rendimientos
promedian los 83 qq/ha y hay un excedente de humedad en los granos de 2 a
4 puntos que incurre al productor a aumentar sus costos de secada. Por
otro lado, los productores que no quieren incurrir en este costo,
arriesgan la calidad de la mercadería. En el
noroeste bonaerense la falta de piso en los lotes impide la colecta y ya
se esta notando los vuelcos de la plantas, además del desgrane y la
pérdida de calidad de los granos. Los maíces sembrados en diciembre
presentan en general más dificultades para llegar a la humedad de recibo
que un maíz temprano. Pero esto se ve actualmente agravado porque la
humedad relativa de los últimos 15 días promedia el 80% (ver mapa) y los
pronósticos a corto plazo presentan nuevas lluvias para el fin de
semana.
El
avance de siembra de trigo en la región llega al 84%. El noroeste de
Buenos Aires presenta falta de piso para continuar con la siembra de los
ciclos cortos. También hay área encharcadas con problemas de
establecimiento de las plántulas. En contraste, en el este de Córdoba
donde escaseaba el agua en superficie, las últimas lluvias permitieron
incorporar algún lote que quedaba pendiente. Las heladas no causaron
daños considerables en los cereales, aunque sí hay algunas variedades
con la punta de hoja amarillenta o quemada. La humedad del suelos y las
lluvias amortizan lo efectos adversos de las bajas temperaturas. En
función fertilización aplicada, no se esperan altos potenciales de
rindes. La dosis de nutrientes se ajusta a rinde promedios de 30 a 35
qq/ha, pero hay casos que evalúan como evoluciona el cultivo para
decidir una re-fertilización nitrogenada en macollaje. Los lotes
implantados en la región cursan lo estadios de emergencia (12%),
foliación (72%) e inicio de macollaje (17%). Las calificaciones que
reciben van de buenas a excelentes en el 90% del área.
Los
lotes de coberturas son escasos en la región a pesar de las napas
cercanas en superficie. Incluso muchos lotes de trigo se sembraron con
ese fin.
Reservas para trigo al 10/7/15
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